Las energías convencionales aportaron el 62 % de la electricidad demandada en España durante el primer semestre de 2017, lo que supone un incremento del 22,2 % de la producción de estas energías, frente a la caída del 46,8 % de las energías renovables.
Así lo reflejan los datos de la Red Eléctrica de España, aportados este por la dirección de la Central Nuclear de Almaraz. Según estas cifras, desde el 1 de enero hasta el 30 de junio de 2017, la demanda eléctrica en España peninsular alcanzó la cifra de 122.530 GWh, lo que supone, con respecto al mismo periodo de 2016, un incremento del 1,2 %.
La producción bruta de las energías convencionales se situó en 75.946 GWh, un 22,2 % más que en el mismo periodo del pasado año. La que más aportó fue la energía nuclear, con 28.460 GWh, un 23,2% de total, y que registro un incremento del 3,3 % respecto al primer semestre de 2016.
Las plantas de carbón generaron 19.985 GWh, lo que supuso prácticamente el doble que en los primeros seis meses de 2016 (10.039 GWh). La energía procedente de ciclos combinados incrementó un 33,3 %, obteniendo una producción de 12.125 GWh.
El conjunto de las energías convencionales registraron este incremento, principalmente, por el aumento de producción de las centrales de carbón y de los ciclos combinados.
Por lo que respecta a la producción bruta de las energías renovables, esta supuso 43.584 GWh, lo que indica una caída del 46,8% en relación al primer semestre de 2016, en el que se produjeron 63.989 GWh.
La energía eólica volvió a liderar el conjunto de estas energías, con 25.185 GWh, pero sufrió una caída del 12,1 % de la producción respecto al mismo periodo del año anterior.
Sin embargo, la caída más grande la acusó la energía hidráulica, con un descenso en la producción del 51,7 %, pues pasó de los 27.221 GWh de los seis primeros meses de 2016 a los 13.159 GWh del primer semestre de este año.
En resumen, la caída productiva de las llamadas fuentes renovables se ve ocasionada esencialmente por el descenso de energía hidráulica.
Atendiendo a la potencia instalada en España durante el primer semestre de 2017, el ciclo combinado supuso el 24,9 %, seguido de la eólica (22,9 %), hidráulica (17 %), carbón (9,5 %), nuclear (7,6 %), solar fotovoltaica (4,4 %) y solar térmica (2,3 %).
Por tanto, la energía nuclear con el 7,6 % de la potencia instalada ha aportado el 23,2 % de la electricidad, mientras que la energía eólica con el 22,9 % de la potencia instalada ha generado el 20,6 %.
En este primer semestre de 2017 la energía hidráulica ha aportado con su 10,7 % de potencia instalada casi el 17 % del total, la cogeneración y el resto de energías no renovables con el 6,7 % han aportado el 11,3 %, y el carbón, con una capacidad del 9,5 % del total del sistema, ha ofrecido el 16,3 %.
Ambas energías solares en conjunto tienen de potencia instalada el 6,7 % lo cual se traduce en el 5 % de la energía total obtenida desde enero a junio de 2017.
El resto de energías renovables (biogás, biomasa, hidráulica marina y geotérmica) suponen, a 30 de junio, el 0,7 % de la potencia instalada, aportando así el 1,4 %.
El siguiente cuadro recoge la producción bruta de las distintas energías, sus respectivos porcentajes sobre el total y los aumentos o descensos registrados en el primer semestre de 2017 con respecto al mismo periodo del pasado ejercicio.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios