La extracción de petróleo en el Ártico no es comercialmente viable, ha advertido el director general de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), Fatih Birol, poniendo en duda esta práctica controvertida.
Birol ha explicado al diario británico The Guardian que la tecnología no está lista, y que se enfrenta a obstáculos que pueden resultar demasiado costosos para superar.
“Creo que el petróleo del Ártico no es para hoy ni para mañana – tal vez para el día después de mañana”, dijo. “Es geológicamente difícil, tecnológicamente difícil, hay un montón de retos ambientales, y el costo de producción es muy, muy alto, sobre todo si nos fijamos en los niveles de precios del petróleo actuales”, comentó el director de la AIE.
Aunque Birol no es partícipe de prohibir esta práctica en las aguas del Polo Norte, recomienda a las empresas y a los países involucrados en cerciorarse muy bien de lo que pretenden llevar a cabo.
Shell es una de las pocas petroleras que ya explora en la zona, frente a las costas de Alaska después de que la administración de Obama le otorgara luz verde en agosto. Los grupos ecologistas han pedido la prohibición, diciendo que corre mucho riesgo uno de los últimos paisajes vírgenes de la Tierra.
“La empresa petrolera, debería hacer una evaluación exhaustiva, ver si hay negocio a los actuales precios del petróleo, o por los altos costes de producción, en definitiva, ver si es rentable o no el proyecto”, ha dicho. “Creo que las empresas deben mirar todos estos riesgos combinados. Es por ellos si se gana o se pierde dinero”. Shell ya ha gastado 6.200 millones de euros en demostrar que existen recursos en el Ártico.