Si las naciones del Oriente Medio y el Norte de África (MENA) fueran capaces de alcanzar sus ambiciosos objetivos de energías renovables para 2030, el sector energético de la región podría ahorrar 750.000 millones de dólares (unos 660.000 millones de euros, ha dicho Adnan Amin, director general de la Agencia Internacional de la Energía Renovable (IRENA) en el marco de la sexta conferencia de energía renovable de la agencia MENA.
En declaraciones a los periodistas, Amin hizo hincapié en que el objetivo renovable de casi todos las naciones de MENA se mueve entre el 5% y el 15% de penetración en 2030. En conjunto, si se consiguen estos objetivos, el sector energético de la región se beneficiaría de unos ahorros en torno a los 750.000 millones.
Los cálculos recientes de IRENA incluyen un llamamiento al mundo para aumentar la tasa anual de energía renovable y duplicar la inversión anual actual para llegar a los 770.000 millones anuales. Al hacerlo, IRENA dice, el mundo puede ahorrar más de 4.000 billones de dólares desde hoy al 2030, al tiempo que reduciría las emisiones de carbono en 12 gigatoneladas durante ese período de tiempo.
En la actualidad, las energías renovables representan el 16-17% de la matriz energética global. IRENA está haciendo campaña para que incrementar el objetivo hasta el 36%, que sería una de las opciones más viables y factibles para limitar el aumento de la temperatura a dos grados y así poder lograr los términos del Acuerdo de París.
Hablando específicamente sobre la energía solar, Amin se mostró optimista sobre el impacto positivo y transformador de la tecnología disruptiva en el paisaje de la energía del mundo. “La energía solar ya es competitiva con el gas natural, y el costo de generación de energía fotovoltaica se ha reducido un 80% en los últimos cinco años. No puede haber una mayor reducción de costos “, dijo.
Sin embargo, a pesar de los beneficios obvios de una mayor penetración de las energías renovables -sobre todo en la región MENA- una serie de retos y obstáculos permanecen. El director del Oxford Energy Institute Estudies, Bassam Fattouh, comentó en la conferencia que los objetivos de energías limpias en la región son “muy ambiciosos”.
“Varios desafíos perjudican la producción de energía renovable en la región MENA, tales como el monopolio estatal del sistema de alimentación, la falta de capacidad institucional y los subsidios a las energías convencionales”, dijo Fattouh.
En enero IRENA presentó un informe en el World Future Energy Summit en Abu Dabi que mostraba los inmensos beneficios sociales y económicos que la integración de energía limpia podría aportar a Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), incluyendo una reducción del 8% en la huella de carbono, la creación de 200.000 puestos de trabajo, y una disminución del 16% en el consumo de agua.