Las discusiones sobre el cambio climático se mueven a menudo en el terreno de lo abstracto. Sin embargo, con un aumento peligroso y destructivo de las temperaturas extremas y la consecuente proliferación de sequías a gran escala, sus efectos adversos son cada vez más palpables.
El cambio climático está claramente ya causando enorme sufrimiento humano y cuantiosos costes económicos aquí y ahora. Según las Naciones Unidas, la adopción de energías renovables no sólo ayudaría a combatir estos males del cambio climático, sino que también salvaría millones de vidas cada año.
A finales de 2015, la comunidad internacional acordó en París 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, que incluyen acabar con la pobreza, detener el hambre, lograr la igualdad de género y más. El Objetivo 7 es una llamada al mundo para “garantizar el acceso a una energía asequible, fiable, sostenible y moderna para todos.”
En la Cumbre Mundial de Energía del Futuro 2016 celebrada la semana pasada, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, habló sobre la importancia de avanzar hacia fuentes de energía sostenibles. Ban destacó que la adopción de tecnologías energéticas sostenibles ayudará a combatir el cambio climático y evitar que la temperatura global supere la meta de dos grados centígrados.
Ban estima, además, que la energía sostenible podría ahorrar al menos 4,3 millones de vidas cada año, informó el Centro de Noticias de la ONU. Anualmente, se estima que 4,3 millones de personas en todo el mundo mueren de forma prematura debido a la contaminación de las estufas de interior que queman residuos, carbón, carbón vegetal o animal, según la ONU.
El secretario general también hizo hincapié en el impacto desproporcionado de la energía y el cambio climático en las mujeres. “La mayoría de estas personas son mujeres y niños, que pasan su tiempo cerca de las estufas de leña y de las llamas”, explicó. “Se trata de mujeres y niñas que llevan la peor parte de la recolección de leña y combustibles – actividades que requieren mucho tiempo y que limitan sus oportunidades de trabajo y educación.”
“Las mujeres son a menudo los principales directivos de la energía en sus hogares y comunidades y podrían convertirse en poderosos agentes de la transición hacia las energías limpias”, dijo Ban en la cumbre.