Ya lo habíamos avisado en anteriores informaciones y quien avisa no es traidor. La gripe nuclear francesa, con un parón sin precedentes; la escasa lluvia de los últimos 30 días en comparación con años anteriores y el mantenimiento de centrales nucleares en España han creado un hueco térmico que hacía tiempo que no se veía por estas fechas y eso ha supuesto una fuerte subida del precio de la electricidad en el mercado.
Así, el recibo de la luz de todos los hogares españoles vuelve a subir por séptimo mes consecutivo. En el caso de un perfil de consumidor medio, con tarifa regulada PVPC, una potencia contratada de 4,4 kW y un consumo mensual de 350 kWh, la factura eléctrica se dispara hasta los 74,2 euros. Esta cifra es un 2,6% más respecto a la factura récord de octubre.
En mayo empezó el ralli alcista de la luz y parece que no tiene fin. Desde los 57,1 euros que se pagaron en abril ahora el mismo consumidor abonará 74,2 euros. Son 17 euros más. En porcentaje la cifra asusta, un 30% más que hace siete meses.
Mes a mes ha ido subiendo. El mes que más lo ha hecho ha sido octubre, pero este noviembre aunque no lo parezca ha sido muy pintoresco por todo lo que ha sucedido. En el mercado mayorista eléctrico, también conocido como pool, se han marcado varios días el récord de precio más caro del año. El último, el pasado 29 de noviembre cuando el precio marcó por encima de 65 euros MWh.
De esta manera, el precio medio del pool en noviembre ha sido de 56,13 euros MWh, un dato que asusta para un mes de noviembre. Estos 56 euros no se veían desde hace ocho años, cuando en 2008 se disparó el precio del pool hasta los 66 euros MWh, en el archiconocido mes de los ciclos combinados.
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