Forestalia era hasta hace cuatro días una verdadera desconocida. Por lo menos en el sector eólico, no tanto así en el de la biomasa. Acudió a la subasta eólica con unas pretensiones que le alzaron como absoluta vencedora de la misma al ofrecer una quita del 100%, es decir, fue a precio cero y sin percibir prima alguna por la producción de la energía de las futuras instalaciones. Solo cobrará lo que marque el precio del mercado mayorista.
Esta acción sacó de las casillas a muchos de los promotores que acudieron a la subasta eólica. Por primera vez desde 2012, el Gobierno ofrecía la oportunidad, de nuevo, de percibir unas primas por instalar renovables. Solo eólica y biomasa. Y además lo hacía de una manera novedosa en el mercado español, la subasta. Quien ponía el precio más barato se lo llevaba. Y así fue.
La competencia no entendía que Forestalia y otras empresas pujaran tan bajo, sin percibir primas, ya que esa operación la podrían hacer fuera de lo que es la subasta en sí. En cualquier momento una compañía puede instalar un parque eólico o fotovoltaico y acudir al pool.
Pero Forestalia entendía que haciéndolo en la subasta el efecto iba a ser mayor, tal y como ha quedado demostrado. "La subasta le ha dado a Forestalia la oportunidad de presentarse en sociedad -en el pool no lo habría podido hacer- y demostrar que en el sector hay empresa jóvenes y nuevos entrantes que quieren competir sin subvenciones ni primas", afirman fuentes de la compañía.
La empresa aragonesa está liderada por Fernando Samper Rivas, hasta abril de 2011 consejero delegado del Grupo Jorge (una empresa cuyo principal negocio es el cárnico/porcino), que tenía actividades en energías renovables desde 1997. Pactó su salida del Grupo Jorge en 2011 y creó Forestalia con parte de los activos energéticos de la empresa familiar y con los adquiridos a la alemana RWE en biomasa.
Otra de las razones por las que ha optado por no percibir primas es que la tecnología ahora lo permite. "Son proyectos de alta tecnología y alta eficiencia en un estado de desarrollo muy avanzado con el objetivo de producir energía eléctrica sostenible y barata. La subasta, precisamente , se convocaba a la baja para evitar que el consumidor y los españoles -vía impuestos- paguen esas primas en forma de sobreprecios.La tecnología de Forestalia le permite hacer rentable este negocio sin recibir primas"., aseguran.
Críticas al sistema de subvenciones
La compañía quería dar un puñetazo en la mesa en la adjudicación de los megavatios eólicos y de biomasa en la subasta del pasado jueves. Sabe perfectamente lo que ha hecho. Y entiende que otros actores se hayan podido sentir molestos por su actuación. "Es lógico que otros se hayan enfadado. Han quedado en evidencia, al tratar de demostrar sin éxito que la generación eléctrica necesita, sí o sí, subvención", explican.
Desde luego, Forestalia no comparte en buena medida el funcionamiento del mercado eléctrico español. La compañía explica así el rol que quiere jugar respecto a los grandes players del mercado. "El pool, aparentemente abierto, esta controlado por las grandes empresas del sector. Forestalia y otras pequeñas no tienen los costes de estructura y funcionamiento de las grandes y, por tanto, pueden aligerar sus ofertas y prescindir de primas"., afirman las fuentes.
Nuevos parques
La compañía aragonesa asegura que posee en la actualidad 13 parques eólicos en funcionamiento, la mayoría en la zona de Aragón. Antes de celebrarse la subasta tenía proyectados otros 270 megavatios en distintas instalaciones. Ahora se ha hecho con 300 MW que los destinará a estos proyectos y a otros nuevos, a los que hay que buscar una ubicación que sea la idónea para que sean rentables. Ahora tiene cuatro años para formalizar los parques.
Además, la hasta ahora desconocida empresa de renovables estudiará la posibilidad de acudir a futuras subastas, si el Gobierno decide finalmente ponerlas en marcha. "Lo estudiaremos. Somos una empresa que va paso a paso y, logicamente, no queremos avanzar más rápido de lo que es aconsejable".
Desde el pasado 14 de enero de 2016, Forestalia ha pasado a formar parte de la historia de las renovables, por ser la empresa que arrasó en la primera subasta para renovables de España y por ser la primera en apostar en eólica sin percibir ningún tipo de subvención. Todo un logro.
Jorge Acha
18/01/2016