La empresa Makai Ocean Engineering puso en marcha la semana pasada una planta de energía térmica oceánica (OTEC) conectada a la red de 100 kW en las islas Hawai. La planta, la mayor del mundo de este tipo, ha requerido una inversión de de cinco millones de dólares, y tiene capacidad para producir electricidad suficiente para cubrir el consumo de unas 120 familias.
El funcionamiento de este tipo de plantas se basa en la diferencia de temperatura existente entre las aguas profundas –más frías- y las de superficie –más templadas por el efecto de la energía solar- . Así, mediante el bombeo de grandes cantidades de agua del fondo y la superficie, se produce electricidad en una estación ubicada en tierra mediante una turbina de vapor, tal y como se puede observar en la siguiente infografía.
"Hoy se pone en marcha la planta de energía térmica oceánica operativa más grande del mundo", dijo el gobernador de Hawai, David Ige. "Esta planta es un excelente banco de pruebas para la futura comercialización de la tecnología de conversión de energía térmica oceánica y para reforzar la innovación, además de un trampolín para acometer proyectos más grandes que proporcionarán cantidades importantes de energía limpia y estable a Hawai y a otros lugares del Asia Pacífico, como Okinawa, en un futuro próximo".
El potencial de este tipo de instalaciones se está desarrollando en el Laboratorio de Energía Natural de Hawai (NELHA) y está siendo considerado por un consorcio internacional en el marco del acuerdo de energía limpia Okinawa-Hawaii recientemente firmado. Makai, de hecho, está convencida del enorme potencial que tienen este tipo de instalaciones en sistemas insulares y ya planea otra instalación a mayor escala.
Alejandro García Huante
12/03/2019