Siete países de Europa central y del Este se oponen a los planes de Rusia de duplicar la capacidad de su gasoducto a Alemania porque consideran que va en contra del interés de la UE y amenaza con desestabilizar más a Ucrania, publica hoy el portal de información europea EurActiv.
Un grupo de empresas europeas firmaron en septiembre pasado un acuerdo con el consorcio estatal ruso Gazprom para ampliar el gasoducto Nord Stream a Alemania, evitando a Ucrania. El gasoducto ruso-germano unirá ambos países a través del mar Báltico.
En una carta con fecha del miércoles 26 y entregada para su firma a Bulgaria, República Checa, Estonia, Grecia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumanía y Eslovaquia, se señala que el proyecto debería someterse al escrutinio regulador más estrecho, y se insta a un “debate incluyente” sobre este asunto en la próxima cumbre europea a mediados de diciembre, indica Euractiv.