Los costes de fabricación de los módulos fotovoltaicos en China siguen siendo mucho menores que en otras partes del mundo. El año pasado, los principales fabricantes fotovoltaicos chinos produjeron los módulos solares a 0,47 dólares por vatio, un 22% más baratos que sus rivales de los países occidentales y Japón. Esta es una de las conclusiones de un estudio encargado por Solar Alliance for Europe (SAFE) y realizado por la firma de consultoría IHS, que examina las razones de las diferencias de precios regionales, así como las altas tasas de reducción de los costes de fabricación de la energía solar en todo el mundo.
En el informe, titulado The Price of Solar – Benchmarking PV Module Manufacturing Cost IHS examina el costo de fabricación directa del modulo de los proveedores de nivel 1 por regiones entre 2012 y 2015. IHS pondera los datos de las distintas empresas investigadas por la cantidad de envíos y agrupa los fabricantes en tres grupos regionales: “China” (Trina Solar, Jinko Solar, Canadian Solar y JA Solar), “Resto de Asia” (Hanwha Q-Cells y REC) y “Resto del mundo” (SolarWorld, Kyocera y Sharp).
En 2015, estas nueve empresas representaron el 38% de la capacidad de fabricación mundial de energía fotovoltaica y el 47% de la producción mundial de módulos.
Mientras que las reducciones de costes regionales variaron entre el 33% y el 47%, los datos indican que, si bien la diferencia de coste entre los grupos se está reduciendo, el liderazgo chino en costes aún perdura. De hecho, el coste de producción de las empresas del grupo “Resto del mundo” van con dos años de retraso sobre las chinas.
En 2015, los proveedores de nivel 1 con centros de producción ubicados en los países occidentales y Japón produjeron módulos fotovoltaicos a 0,60 $/ vatio. Durante el mismo período de tiempo, los productores de nivel 1 en China fueron un 22% más baratos (0,47 $ / vatio), mientras que los productores en Singapur y Malasia fueron un 10% más baratos (0,54 $ / vatio).
En cuanto a las razones que están detrás de esa brecha de costes, IHS identifica tres factores clave:
- Las economías de escala. Las fábricas en China tienen capacidades de producción y de salida del producto mucho más altas que en otros lugares. La fábrica más grande de China tiene una capacidad de 3,2 GW, mientras que la fábrica más grande de “Resto del mundo” es de sólo 650 MW. También el tamaño medio de las fábricas es significativamente más grande y las plantas se han diseñado de forma óptima para una mayor potencia y menor costo unitario, ya que los grandes volúmenes permiten descuentos considerables en materiales y equipos.
- La proximidad a los proveedores de materiales de bajo coste. Las principales compañías chinas fueron las primera en utilizar proveedores locales con bajos costes de material y, por tanto, pueden reducir sus costes de materiales en comparación con sus rivales globales.
- Tendencia a la fabricación de módulos estándar. Tanto las empresas chinas como las del resto de Asia reducen sus costes centrándose en productos estándar (multi-cristalinos de 60 células). En contraste, las compañías occidentales y japonesas (“Resto del mundo”) que están orientadas hacia proveedores que históricamente utilizan una gama de paneles más amplia de tamaños y tecnologías.
IHS señala que estos factores están relacionados entre sí y la suma de ellos permite la reducción de los costes de producción de un módulo solar fotovoltaico. Las diferencias de escala, la cadena de suministro de bajo costo local y el enfoque en productos estándar arrojan como resultado una ventaja en costes del 22% para los productores chinos en comparación con sus competidores de Europa, EEUU y Japón.
El mercado fotovoltaico seguirá creciendo, con la mayor demanda en Asia, particularmente en China. IHS estima que el crecimiento anual en términos de capacidad instalada será del 8,6% entre 2015 y 2019. En ese período, se prevé que la capacidad acumulada de las instalaciones globales se duplicará.
El estudio prevé una caída del 21% del coste de producción entre 2015 y 2019, lo que supone una disminución del costo anual media del 5% en los cuatro años. En 2019, el coste de fabricación de módulos fotovoltaicos tiene probabilidades de alcanzar un rango de 0,35 $ / vatio en China y de 0,48 $ / vatio en el resto del mundo.
Caída de costes en todo el mundo
Los costes de fabricación de todos los ‘jugadores’ de este mercado han disminuido significativamente en los últimos cuatro años debido a la eficiencia de la producción, de los productos, a las innovaciones materiales y las economías de escala, según el informe. La automatización de procesos tecnológicos ha permitido que se produzcan más paneles cada año. Los costes de los materiales se han reducido mediante la reducción en sí o por la sustitución por materiales de menor costo. El rendimiento de la célula y el módulo se ha incrementado. El rendimiento promedio de los módulos de silicio comerciales ha mejorado en la última década en alrededor de 0,3 puntos porcentuales por año.
En 2012, todos los fabricantes de Nivel 1 tuvieron significativamente costos más altos que en 2015. En 2012, los fabricantes chinos lograron el menor costo de fabricación en 0,72 $ / vatio. En comparación, los proveedores del grupo “Resto de Asia” tenían un coste ligeramente superior de 0,81 $ / vatio. Mientras que las compañías de países occidentales y japonesas de nivel 1 tuvieron el coste mayor, de 1,13 $ /vatio.
IHS subraya que mientras que los proveedores chinos actualmente dominan la producción de módulos solares, “el panorama de la industria no está escrito en piedra”.
La integración vertical de la oblea, las células y la captura del módulo tiene un valor mayor en las industrias pioneras hasta el punto de tener un peso mayor que las fluctuaciones de la oferta y la demanda, señalan los analistas de IHS. A medida que la industria vaya madurando, es probable que se dividan en áreas especializadas con el fin de aprovechar las economías de escala y reducir sus gastos de capital.
“El mercado solar va a seguir creciendo a largo plazo, lo que le hace más interesante para los inversores”, dijo IHS. “A pesar de la intensa competencia, creemos que los nuevos modelos de negocio y los inversores van a aparecer y que la lista de los diez principales proveedores de módulos continuará cambiando como lo ha hecho durante los últimos 10 años”.