El Instituto Geológico y Minero de España (Igem) y la Diputación de Alicante han elaborado el primer mapa de energía geotérmica de la provincia de Alicante, que revela el gran potencial de esta fuente de energía renovable almacenada en la corteza terrestre.
Los científicos han detectado que la provincia cuenta con condiciones propicias para las denominadas operaciones de media y baja temperatura, que resultan idóneas para la producción de energía eléctrica y para la climatización.
Estas localizaciones indicadas en el mapa geotérmico se sitúan en la Vega Baja y en la cuenca alta del río Serpis, para generar luz. En cuanto a los sistemas climatizadores, se encuentran en la cuenca alta del Vinalopó, las costas de Benissa y Villajoyosa y el área de Jijona-Busot.
Las aplicaciones de las estructuras de climatización de muy baja temperatura sirven para los sistemas de aire acondicionado y bombas de calor, ya que en lugar de intercambiar calor o frío con la atmósfera ,como hacen los equipos habituales, cuentan con unos intercambiadores enterrados en pozos en el subsuelo mucho más eficientes, dado la temperatura constante del mismo.
Las operaciones de baja y media temperatura se basan en la utilización directa de agua caliente extraída del subsuelo, sobre todo en circuitos de calefacción o como agua caliente sanitaria.
Este tipo de aplicaciones son interesantes para grandes edificios o viviendas de nueva construcción y para los que se prevé un alto consumo en climatización, ya que pueden suponer un ahorro de hasta un 40 % de energía.
España, todavía, no cuenta con plantas geotérmicas, pese a que en Almería y en la isla de La Palma también existen zonas idóneas para ello.