Abengoa ha celebrado la que ha sido la primera Junta General Ordinaria de Accionistas que se lleva a cabo desde que se diera por concluido el proceso de reestructuración financiera, a partir del cual, la compañía ha iniciado una nueva andadura cuyo principal objetivo es “la reactivación del negocio y de la posición de liderazgo en los mercados en los que el grupo ha estado operando”, tal y como ha recordado Gonzalo Urquijo, presidente ejecutivo de la compañía.
Asimismo, el presidente ejecutivo de Abengoa no ha querido dejar de hacer balance del pasado ejercicio y de lanzar un mensaje de optimismo hacia un futuro “que Abengoa afronta con el entusiasmo de demostrar toda su experiencia y todo su conocimiento del mercado de la ingeniería y construcción en los sectores de energía y agua”. Se trata de un “reto complejo pero no por ello menos ilusionante” y que Abengoa afrontará con “determinación, compromiso y un claro convencimiento de alcanzar las metas propuestas”.
En este sentido, ha recordado que Abengoa ha cerrado el año 2016 “con una cartera de proyectos adjudicados que alcanzó los 2.700 M€ y en estos momentos estamos valorando proyectos potenciales que podríamos llevar a cabo, por un valor superior a 30.000 M€”. Todo ello “muestra que nuestros clientes siguen confiando en nosotros y en nuestros equipos para la ejecución de proyectos”.
Asimismo, Abengoa sigue avanzando en su plan de desinversiones y “demostrando su capacidad para rotar activos”. Además de las recientes desinversiones como las ventas de Bioenergía Europa, Bioenergía USA, Bioenergía San Roque, Ashalim, o Qingdao, entre otras, la próxima desinversión prevista más relevante en términos económicos es la venta de Atlántica Yield, la cual “debería concluir “en un futuro próximo”. La venta de Atlantica, así como la del proyecto A3T, permitirán repagar la deuda nueva asociada al proceso de reestructuración.
Asimismo, están en proceso avanzado de desinversión el ciclo combinado Norte III y el acueducto del Zapotillo (en México), el Hospital del Tajo, y las desaladoras de Ghana y Chennai (esta última en India). Asimismo, también se encuentran incluidos en el plan de desinversiones activos como las plantas solares de Khi y Xina Solar One (Sudáfrica), la central híbrida solar-gas de Hassi R’Mel y la planta desaladora de Ténès (Argelia); o el ciclo combinado A4T en México , entre otros activos.
Política de remuneraciones y Plan de Incentivos
En otro orden de cosas, la Junta General Ordinaria de Accionistas de Abengoa también ha aprobado la Política de Remuneraciones de los Consejeros correspondiente a los ejercicios 2018, 2019 y 2020 así como la modificación de la de 2017.
Esta política incluye un Plan de Incentivos a largo plazo (Managament Incentive Plan) para 125 directivos cuyo objetivo, tal y como ha señalado el presidente de Abengoa no es otro que “retener y vincular al personal clave necesario para desarrollar el Plan de Reestructuración de la compañía, y a través del cual, se busca incentivar al equipo gestor necesario para llevarlo a cabo”. Así las cosas, el equipo gestor solo recibirá el incentivo si se cumplen determinadas condiciones ligadas, entre otras cuestiones, a la generación de Ebitda del nuevo negocio.
Otras decisiones
La Junta de Accionistas también ha aprobado las cuentas anuales de la sociedad y de su grupo consolidado correspondientes al ejercicio 2016, la aprobación de la gestión social y la aplicación del resultado del ejercicio. Además, se ha reelegido a Deloitte, S.L. como auditor de cuentas para el ejercicio en curso y se ha nombrado a PricewaterhouseCoopers Auditores SL como auditor para los ejercicios 2018, 2019 y 2020.
Este último nombramiento se produce en el marco de una política de rotaciones, dentro de la normalidad en este tipo de nombramientos en las sociedades cotizadas.
Asimismo, se ha acordado mantener la vacante dejada por la dimisión del consejero D. Miguel Antoñanzas Alvear, a la espera de que concluya el proceso de selección del nuevo consejero independiente, conforme a la Política de Selección de Consejeros de Abengoa. Finalmente, la agrupación de acciones (“contrasplit”) propuesta por la compañía no ha podido ser sometida a votación al no haberse alcanzado el quórum necesario para ello.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios