La empresa de ingeniería y energía Abengoa facturó entre 3.375 y 3.400 millones de euros en el primer semestre del año, un 3% más que en el mismo periodo de 2014, según los datos preliminares enviados hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El resultado bruto de explotación (ebitda) se ha situado entre 640 y 660 millones de euros, lo que supone un repunte del 9%.
El consejero delegado de Abengoa, Santiago Seage, ha ofrecido una conferencia con analistas para presentar los resultados preliminares del primer semestre.
Tanto las cifras avanzadas como las pendientes están en línea con el mercado, según Seage, quien ha insistido en su carácter provisional y ha afirmado que la compañía se encuentra en una buena posición de liquidez y que prevé financiarse sin problemas y a costes bajos a corto plazo.
Por otra parte, Abengoa ha decidido dar a sus bonos convertibles y canjeables las mismas garantías que a los "high yield" -alto rendimiento- para evitar que algunos inversores "tomen posiciones irracionales" en sus seguros de impago de deuda (CDS).
"No vamos a usar más los CDS", ha afirmado Seage durante la conferencia, al tiempo que ha achacado a esta cuestión el fuerte desplome que han sufrido hoy en bolsa las acciones de la compañía.
"Como compañía tenemos que tener cuidado con nuestros CDS, que la gente no tenga oportunidades para hacer cosas injustas" con ellos, ha explicado, para añadir que la diferencia en las garantías "les ha dado la oportunidad de jugar con los CDS. Rebajar el coste de la deuda
"Para nosotros es importante que el coste de la deuda baje", ha considerado, y para ello "tenemos que arreglar nuestros CDS" con el objetivo de que "este juego pare", al tiempo que ha lamentado que la mejora de la calificación crediticia no ha mejorado el coste de la deuda.
La presentación preliminar de resultados, anunciada con una hora de antelación, se produce en un día en que las acciones de Abengoa han sufrido hoy la mayor caída de la bolsa española al desplomarse un 7,66 %, hasta 2,42 euros.
Abengoa ya sufrió fuertes caídas en bolsa a finales de 2014, cuando surgieron ciertas dudas sobre la clasificación de su deuda, algo que fue finalmente aclarado por parte de sus directivos.
Con respecto al funcionamiento del negocio, Seage ha avanzado que la intención del grupo es crear el próximo año un nuevo vehículo de inversión "APW", es decir, una nueva compañía, en la que entraría un socio, y que compraría los proyectos en construcción que se adjudique Abengoa, con el objetivo de que esta pueda liberar recursos para nuevas iniciativas.
Además, prevé cerrar este mismo mes la venta de activos por 100 millones de euros a su filial cotizada en los Estados Unidos Abengoa Yield, una operación ya anunciada.
Seage se ha mostrado confiado con la evolución del plan de desinversiones y ha anunciado que trabaja en una última transacción de gran tamaño que previsiblemente se completará antes de finales de verano.
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