Cantabria, territorio prohibido para la eólica

El mapa de exclusión eólica diseñado por el Gobierno de Cantabria plantea que casi el 94% del territorio de la comunidad quede libre de la instalación de aerogeneradores eléctricos. Otro 3% queda pendiente de futuras normativas, mientras que el entorno de El Escudo y zonas del alto Besaya, Campoo o Soba sí podrían albergar parques.

El consejero de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo, José Luis Gochicoa, que ha comparecido este martes a petición propia en el Parlamento cántabro. Ha informado sobre las zonas de exclusión eólica, ha avanzado que este mapa se va a llevar al Consejo de Gobierno en mayo para su aprobación.

Y ha anunciado que varios parques planteados en la comunidad, entre ellos los de Garma Blanca, Bustrafrades o La Ribota quedarían fuera de este mapa y, por tanto, no se podrían construir.

Varios proyectos afectados

El objetivo, según ha dicho, es posibilitar que se suspendan licencias en las zonas en las que no se permita la instalación de parques.

A su juicio, muchos proyectos de parque "desistirán de procedimientos con este mapa", lo que supondrá un ahorro a la Administración al evitarse seguir con su tramitación.

Existen zonas de exclusión y otras condicionadas a, por ejemplo, la normativa de la perdiz pardilla o del oso. También depende de infraestructuras que podrían ser potencialmente modificadas como las líneas eléctricas o las captaciones de agua.

Así, se tienen en cuenta zonas de relevancia ambiental, como las que albergan ciertas especies salvajes, ríos, embalses, estuarios, acantilados, humedales, bosques, o elementos patrimoniales. También se tiene en cuenta la geología y geomorfología del terreno y el paso de tráfico aéreo de los aeropuertos de Santander y Bilbao.

A un kilómetro de la población

Además, se ha establecido una distancia mínima de mil metros a los núcleos de población con un mínimo seis viviendas para situar aerogeneradores.

"Cantabria tiene capacidad de tener parques eólicos sin necesidad de andar provocando un impacto importante a la sociedad", ha dicho Gochicoa, quien valorado que "en gran parte del territorio de Cantabria es imposible que haya parques".

Así, se podrían instalar, sobre todo, cerca de El Escudo, en zonas altas del Besaya y al sur del pantano del Ebro, ha apuntado.

"El mapa no es un cheque en blanco. No quiere decir que se puedan realizar donde no está prohibido, sino que hay que seguir con la tramitación urbanística y ambiental de cada parque", ha dicho.

Algunos de los que están en tramitación, según ha avanzado, son "claramente imposibles", como los de la Ribota, Bustafrades, Garma Blanca, Quebraduras y todos los de la zona pasiega y del Miera. También el de Valdeolea, el de Campoo de Yuso y el de Campoo de Suso, o el de Aguayo II, en Guriezo.

Apoyo parlamentario

Por último, el consejero de Obras Públicas ha pedido a los grupos parlamentarios que apoyen una enmienda a la Ley del Suelo que registrará el PRC. Pretenden evitar el avance de la tramitación de parques ya en fases previas a la concesión de licencia.

El popular Roberto Media cree "los políticos tienen mucho que decir" a este mapa, sobre todo porque se ha diseñado de acuerdo a criterios que se han decidido "unilateralmente". Al PP le preocupa que este documento se vaya a aprobar en Consejo de Gobierno para suspender "las licencias sin que haya pasado por nadie"

Además, en su opinión, el equipo de gobierno "ha tenido tiempo de sobra de hacerlo y es responsabilidad de PRC y PSOE que no se haya aprobado antes".

La diputada de Ciudadanos, Marta García, ha incidido en que llegan "muy tarde porque ya se ha generado el caldo de cultivo para que los negacionistas de todo recelen de la implantación de las renovables".

El portavoz regionalista, Javier Hernando, ha defendido este "minucioso" trabajo, que ha dejado a Cantabria "prácticamente en lo mínimo" para instalar parques eólicos. Por su parte, el socialista Javier García Oliva ha diferido de la opinión del diputado del PP porque, a su juicio, la zonificación "debe estar basada única y exclusivamente en criterios técnicos".

"Como introduzcamos el más mínimo criterio político, estamos perdidos", ha subrayado, antes de reclamar la participación ciudadana en el mapa.