
La petrolera Shell tuvo un beneficio atribuido hasta septiembre de 1.000 millones de dólares (914 millones de euros), un 93 % menos frente al mismo periodo de 2014 cuando ganó 14.279 millones de dólares (13.051 millones de euros), debido al descenso de los precios del crudo.
En un comunicado remitido a la Bolsa de Valores de Londres, la petrolera señaló que la facturación en el periodo fue de 206.814 millones de dólares (189.027 millones de euros), un descenso del 37% con respecto a un año antes, cuando sus ingresos fueron de 328.731 millones de dólares (300.460 millones de euros).
El beneficio bruto alcanzó los 2.288 millones de dólares (2.091 millones de euros), un retroceso del 91 %.
Las adquisiciones de la compañía totalizaron 151.478 millones de dólares (138.450 millones de euros).
Shell registró una pérdida neta entre julio y septiembre de 7.416 millones de dólares (6.778 millones de euros), frente al beneficio neto de 4.463 millones de dólares (4.079 millones de euros) en el mismo trimestre del año pasado.
Además, la empresa informó de que el consejo de administración de la empresa dispuso el pago de un dividendo correspondiente al tercer trimestre de 2015 de 47 centavos por acción ordinaria.
El consejero delegado de Shell, Ben van Beurden, admitió el fuerte impacto que ha tenido la caída de los precios del petróleo en los resultados de la compañía, que los divulga en dólares porque es la divisa en la que cotiza el oro negro.
Van Beurden señaló que el negocio integrado de Shell ha ayudado a la empresa a “mitigar” el impacto del descenso del crudo, y destacó que el volumen de producción ha aumentado.
La empresa agregó que ha disminuido sus costes y recuerda su decisión de suspender sus operaciones de exploración en las costas de Alaska y la construcción del proyecto petrolero Carmon Creek en Canadá.
“Estas son decisiones difíciles y dolorosas”, reconoció el consejero delegado, que manifestó su compromiso de transformar a Shell en una empresa competitiva.
El precio del crudo ha caído a 50 dólares el barril este año frente a los 100 dólares en que estaba hace un año.
Los precios han retrocedido por un exceso de producción y una menor demanda, pero la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha decidido no recortar la producción con el objetivo, según indican los expertos, de competir con los productores de crudo de esquisto en EEUU, pues confían en que éstos no puedan resistir precios tan bajos del petróleo.