Ya lo contamos en otro Cortocircuito. A Soria le llega su ‘via crucis’ se titulaba la información. Dicho y hecho. Dejábamos entrever que el escándalo que se formó por la no inclusión de los informes de las consultoras Roland Berger y Boston Consulting Group a la hora de decidir la retribución a las instalaciones de renovables iba a dar que hablar.
Y claro, ya ha llegado ese momento. En los próximos días el caso llegará a las manos de la Fiscalía Anticorrupción. La acusación será contra el actual Gobierno, y dirigida contra los dos máximos responsables del Ministerio de Industria, José Manuel Soria y Alberto Nadal, artífices del mayor recorte a las renovables.
El sector se echó las manos a la cabeza porque el Gobierno desechó el trabajo de Boston Consulting, mientras que el informe de Roland Berger llegó cuatro meses más tarde. No entendían los inversores de renovables que Industria aprobara un recorte de estas características sin tener un informe técnico que lo respaldara.
Ahora, el via crucis del ministro Soria cogería un tono preocupante para el Gobierno, además, en un momento delicado con elecciones a la vista. En Anticorrupción no van a dar abasto con tanto escándalo. Tras dar pase al caso de los CTC, ahora están en la Fiscalía investigando la presunta corrupción en la adjudicación de los parques eólicos de Castilla y León.
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Qué se puede decir y esperar cuando el engaño y la manipulación es el modo de trabajar de nuestros políticos para el bien del país, claro, a través del bien de sus bolsillos. ¿Escándalo? qué más da uno más, ahí estarán lo tribunales para apaciguarlos.
Soria ha estado buscando su sillita en el Ibex. Espero que eso le salga caro, pues para ello ha intentado, por todos los medios, impedir el desarrollo de eSpaña en renovables. Y eso, en otros países, sería considerado traición. Un político debe trabajar para los ciudadanos, no para las empresas que le darán trabajo cuando salga del gobierno.