Los ministros de Energía e Hidrocarburos de varios países del G77 se reunirán mañana y el sábado en Bolivia para debatir sobre la administración de los recursos naturales y su industrialización para potenciar sus economías.
El ministro boliviano de Hidrocarburos, Juan José Sosa, afirmó en una rueda de prensa en la ciudad sureña de Tarija, sede de la reunión, que más de treinta delegaciones de América Latina, África, Asia y el Medio Oriente confirmaron su presencia en el encuentro organizado por Bolivia al tener la presidencia temporal del bloque.
El encuentro será inaugurado por el presidente boliviano, Evo Morales, quien hablará sobre las políticas de nacionalización que permitieron en su país el control estatal de los sectores de hidrocarburos y de generación de electricidad. Los ministros debatirán sobre la gobernanza de los recursos naturales y el desarrollo sostenible, los ingresos producto de los recursos naturales y la redistribución, y los derechos de propiedad, las negociaciones y los arbitrajes internacionales.
En el foro también se discutirá sobre el cambio estructural y la diversificación basada en los recursos naturales; el impacto de la industrialización de los recursos naturales en el desarrollo local y como último tema se abordarán los modelos de industrialización. La cita será asimismo escenario de intercambio de experiencias y la cooperación de los países en el modelo Sur-Sur para generar nuevas líneas estratégicas sobre la gobernanza de los recursos.
En la misma rueda de prensa, el embajador boliviano ante Naciones Unidas, Sacha Llorenti, destacó que Bolivia es hoy un caso estudiado porque el control estatal de los recursos naturales "y la redistribución de la riqueza" contribuyen a bajar la pobreza. Morales nacionalizó varias empresas de hidrocarburos en 2006 para controlar la riqueza del gas que posee Bolivia y de la que un 85 % se encuentra en la región sureña de Tarija, sede de la cumbre.
El mandatario ha subrayado varias veces que antes de la nacionalización el Estado recibía menos de 500 millones de dólares procedentes de la explotación de los hidrocarburos, una cifra que en la actualidad roza los 6.000 millones de dólares. Durante estos años, Bolivia se ha beneficiado sobre todo de una multiplicación del precio de gas que se vende a Brasil y Argentina, que está supeditado al valor del petróleo. Sin embargo, la reciente caída de los precios del crudo ha provocado también un descenso en la cotización del gas.
El G77 agrupa a un total de 133 países, que en mayo de este año se reunieron en la ciudad boliviana de Santa Cruz para conmemorar los 50 años de vida del grupo y discutir una agenda para el desarrollo internacional post 2015. La reunión de Tarija cuenta con el apoyo de la Organización de Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y sus organismos análogos en la zona del Asia y Pacífico y en África.
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