La patronal gasista Sedigas considera que la mitad de la demanda doméstica de gas podría ser cubierta hacia 2030 con gas renovable dado el volumen de residuos existente, aunque habría que apoyar esta tecnología para que haya las inversiones necesarias que abaraten su producción.
El presidente de Sedigas, Antoni Peris, ha destacado hoy, durante la presentación en Madrid de la jornada "El reto de un nuevo modelo energético. La cita frente al cambio climático", que el gas renovable puede ser una solución viable para reducir emisiones contaminantes.
Peris ha demandado la creación de un marco que permita su desarrollo y apoyo como el que se ha dado a otras energías renovables para que se puedan hacer las inversiones que hagan competitivo al gas renovable, cuya producción en la actualidad lo hace más caro que el gas natural convencional.
El gas renovable procede de residuos orgánicos, de biomasa y del excedente de energía renovable, que, tras un proceso, permite obtener un gas (metano o hidrógeno) que puede ser inyectado en las redes del sistema gasista para almacenarlo y ser usado cuando se necesite.
Antoni Peris ha explicado que en Europa hay 367 plantas en condiciones de inyectar a la red de gasoductos gas del que se han sacado todos los subproductos contaminantes, de las que en España sólo hay una, la de Valdemingómez (Madrid).
Ha destacado que el gas renovable reduce, además, la dependencia energética del exterior y, entre sus beneficios está la creación de empleo y su contribución neta al PIB, con 16.000 empleos y una aportación al PIB estimada en 226 millones de euros al año en Europa.
También ha destacado su papel en la reducción de gases de efecto invernadero (calentamiento global de la Tierra) generadas por residuos, la ganadería y la agricultura, como el metano, que en 2016 tuvieron un volumen equivalente a 34,4 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2).
Por otra parte, se ha referido al papel del gas natural en general y ha dicho que, si se quiere hacer una "política clara de reducción de emisiones en generación eléctrica, se tiene que apostar por el gas".
Ha añadido que no tiene sentido dar apoyo a las renovables, cuya generación es intermitente y depende de las circunstancias atmosféricas, con el "mayor producto emisor" de CO2, como es el carbón.
Preguntado por el informe del comité de expertos sobre transición energética, Peris ha manifestado que "la electrificación no es el único camino" para cumplir con los objetivos de reducción de emisiones para luchar contra el cambio climático.
Además considera discutible el traslado de precios de un sector a otro que se recoge en algunas propuestas del informe, así como alguna medidas de fiscalidad recogidas en el documento, que requerirían de una reforma fiscal, de la que habría que pensar bien todos los efectos que tendrá.
Ha destacado el papel del gas natural en la movilidad y ha subrayado que llenar el depósito de un coche de gas no requiere más de diez minutos.
En España hay 8.000 vehículos que circulan con gas natural y las matriculaciones se incrementaron el doble, ha indicado Peris, que ha añadido que el proyecto de Sedigas es superar las cien gasineras en España, donde ahora hay 57, para que se pueda circular sin ningún problema con vehículos a gas no sólo en las ciudades.
Peris ha señalado que ya se puede viajar de Madrid a Barcelona o de la capital de España a Valencia con un coche a gas.
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