Iberdrola y Endesa, dos empresas de éxito en Andalucía

Iberdrola y Endesa son el claro ejemplo del éxito en Andalucía. Ambas empresas no solo han demostrado su capacidad para innovar y adaptarse a las exigencias del cambio climático, sino que también han contribuido significativamente al desarrollo económico de la región. Con inversiones millonarias y proyectos de vanguardia en energías renovables, Iberdrola y Endesa se han consolidado como pilares fundamentales en la evolución del paisaje energético andaluz.

Iberdrola, la primera eléctrica privada europea y la segunda a nivel mundial en capitalización bursátil, ha desarrollado proyectos emblemáticos como la planta fotovoltaica de Andévalo y la planta de hidrógeno verde en Puertollano, situándose a la vanguardia de las energías renovables. Estos proyectos no solo han permitido aumentar la capacidad instalada de energía limpia en la región, sino que también han generado empleo y dinamizado la economía local.

Por su parte, Endesa, con una presencia histórica en Andalucía, ha impulsado la instalación de más de 2.000 megavatios (MW) de capacidad renovable en la región. La empresa ha invertido en proyectos como el parque eólico de El Tesorillo en Cádiz y la planta solar de Las Corchas en Sevilla, consolidando su compromiso con la descarbonización y la sostenibilidad. Además, Endesa ha desarrollado iniciativas de autoconsumo y eficiencia energética que benefician tanto a empresas como a particulares, promoviendo un uso más racional y eficiente de la energía.

Apuesta renovable

Así, Antonio Fernández, delegado institucional de Iberdrola en Andalucía, destacó en el Foro Andaluz de la Energía organizado por El Periódico de la Energía en la sede de EOI en Sevilla el notable éxito de la empresa en su firme apuesta por las energías renovables y la lucha contra el cambio climático. Subrayó que Iberdrola, con una capitalización bursátil cercana a los 80.000 millones de euros, es actualmente la primera eléctrica privada en Europa y la segunda en el mundo en términos de capitalización.

Iberdrola ha lanzado un ambicioso plan de inversión en Andalucía, dividido en dos fases, que permitirá aumentar su potencia instalada de 1.000 a 3.500 megavatios, con una inversión total de 2.500 millones de euros. Entre los proyectos destacados se encuentran el parque eólico en Granada y varias instalaciones fotovoltaicas, algunos de los cuales ya están operativos o en las fases finales de desarrollo.

La empresa también está impulsando el autoconsumo y las comunidades solares en diversas localidades andaluzas, como Sevilla, Jaén y Huelva. Además, Iberdrola ha desarrollado una red de más de 650 puntos de recarga para vehículos eléctricos en Andalucía, y ha establecido un acuerdo con BP para expandir esta red, facilitando así la transición hacia una movilidad más sostenible.

En cuanto a la descarbonización y la electrificación de la economía, Iberdrola está liderando proyectos de hidrógeno, como el de Puertollano, que ya cuenta con 20 megavatios de capacidad operativa. La empresa también colabora con diversas industrias para ayudarlas a reducir sus emisiones, demostrando un compromiso integral con la sostenibilidad.

Fernández hizo hincapié en la importancia de invertir en la mejora de las redes de distribución eléctrica para maximizar el potencial de las energías renovables en Andalucía. Destacó que, a pesar de los avances, es necesario seguir mejorando la infraestructura para asegurar que la energía producida pueda ser distribuida eficientemente a donde más se necesita.

Electrificación

Rafael Sánchez Durán, director general de Endesa en Andalucía y Extremadura, abordó la electrificación de la demanda y la transición energética. Destacó la importancia de sincronizar la inversión en tecnologías de transición energética con la evolución del mercado hacia la electrificación de servicios. A través de una evocadora comparación histórica, resaltó cómo hemos pasado de utilizar biomasa para energía a depender de kilovatios, moviéndonos hacia un mundo de electrones verdes.

Sánchez Durán subrayó que la electrificación debe incrementar significativamente. Actualmente, solo el 26% de la energía final en España es eléctrica, pero se espera que esta cifra se duplique para mediados de siglo. Esto requerirá un aumento masivo en la inversión en redes y tecnologías renovables. Además, enfatizó la importancia de aumentar la demanda eléctrica para evitar precios cero, que desincentivan la inversión en energías renovables.

También mencionó la necesidad de reindustrializar regiones como Andalucía y Extremadura para incrementar el consumo eléctrico, utilizando ejemplos de éxito en la electrificación de diversos sectores industriales y residenciales. Finalmente, Sánchez Durán resaltó que para alcanzar estos objetivos es crucial superar las barreras actuales, invirtiendo en infraestructuras y tecnologías innovadoras, y adoptando un enfoque flexible y digitalizado para gestionar la demanda y la generación de energía.