La reunión de prácticamente la totalidad de la industria española y los sindicatos hoy tiene un tinte histórico. Se han reunido para firmar una Declaración por la Industria, en la que piden al Gobierno y al Parlamento que configuren un Pacto de Estado para desarrollar medidas y políticas de Estado que ayuden a configurar una política industrial sostenida en el tiempo.
“Hay que abrir un amplio debate sobre la estructura económica que queremos en nuestro país y cuáles son los canales de comunicación entre empresas, administración pública y agentes sociales. Es necesario cambiar el modelo económico del país para que España pueda enfrentarse con solvencia a los retos presentes y futuros”, ha señalado Pedro Luis Hojas, de UGT, “los países europeos que han salido más rápido de la crisis ha sido por una buena estructura industrial, por eso no entendemos que la Industria se haya incorporado al área de Economía y se haya desvinculado del de Energía y de la Agenda Digital”.
La representación del sector industrial ha sido muy amplia. Además de las organizaciones sindicales UGT y CCOO, han estado presentes las organizaciones empresariales integradas en la Alianza por la Competitividad de la Industria Española (el sector del Automóvil, Papel, Productos Petrolíferos, Química, Alimentación y Bebidas, Cemento y Siderurgia), junto a los sectores del Metal, de Equipos y Componentes para la Automoción, del Textil, de la Moda y del Calzado.
“El sector industrial es el motor del empleo más estable y con más derechos, es donde se concentra el 56% de las exportaciones totales, es motor del I+D+i en España, y todo ello pese a que la crisis ha hecho mella en unos 800.000 puestos de trabajo perdidos entre 2008 y 2016, es decir el 24% del empleo existente”, ha añadido.
“Hace diez años que surgió la Alianza por la Competitividad de la Industria Española por el coste energético comparativo que supone y suponía entre Europa, América y Oriente Medio”, ha explicado Antón Valero, representante de la Alianza, “y ahora nos enfrentamos a una unión estratégica en nuestro país, donde se coordine una política de cambio climático, energética e industrial para hacernos cargo del cambio que se avecina, un cambio radical en el estilo de vida de los ciudadanos y la industria debe liderar ese cambio si queremos mantener y garantizar un futuro laboral seguro y sostenible”.
Respecto a los costes energéticos, los declarantes señalan que “el coste energético ha subido un 20% respecto de los países con los que competimos, queremos que los costes sociales se saquen de la tarifa eléctrica y llevarlos a Presupuestos”.
También se han referido a la industria de las renovables, de la que han dicho que "es un sector tractor al igual que el de la movilidad sostenible, ambos tienen mucho que ver con el cambio climático, pero no solo, también va a tener que realizar un cambio de paradigma la construcción, donde se tendrá que cambiar la manera de construir los edificios, cómo se calientan o cómo se cocina".
Entre el público, también había una representación política, Patricia Blánquez del PSOE, Rodrigo Gómez de Ciudadanos y Yolanda Díez de Unidos Podemos. Por parte del PP estaba invitada Susana López que finalmente no ha asistido.
Los nueve puntos aprobados en la Declaración son:
- Es imprescindible que, de forma prioritaria, se desarrolle, programe y regule una POLÍTICA ENERGÉTICA estable que permita garantizar el suministro energético a un precio competitivo, que atienda a la necesaria reestructuración de nuestra Industria y Economía, que prime la investigación, el desarrollo y la innovación de nuevas tecnologías sostenibles, que impulse la independencia energética española con el desarrollo de energías renovables, la cogeneración y los recursos autóctonos y que preserve los sistemas de gestión de la demanda.
- Es necesario diseñar una POLÍTICA DE INFRAESTRUCTURAS LOGÍSTICAS Y DE TRANSPORTE que permita mejorar la eficiencia, competitividad y sostenibilidad de los diferentes modos de transporte de mercancías y de las infraestructuras intermodales, así como acelerar el acceso de las empresas radicadas en España a los mercados internacionales.
- Es preciso establecer una POLÍTICA DE I+D+I Y DESARROLLO TECNOLÓGICO Y DIGITAL que facilite y apueste por la actividad innovadora de las empresas y, por otra parte, permita atraer y desarrollar en España centros públicos, privados y mixtos avanzados y especializados en aquellas áreas transversales y esenciales para dotar de base tecnológica a la industria. Es asimismo imprescindible incrementar la inversión pública y privada en investigación, desarrollo e innovación que aumente la generación de producciones de mayor valor añadido.
- Es indispensable impulsar una POLÍTICA DE FORMACIÓN Y EMPLEO que garantice el desarrollo del talento y de la capacitación de los trabajadores a lo largo de la vida laboral, considerando que constituyen el principal y más valioso activo de la empresa en la sociedad.
- Es esencial aplicar una POLÍTICA DE REGULACIÓN INTELIGENTE que, además de proteger los principios de unidad de mercado a escala nacional y europea, evite la inseguridad jurídica que genera la sobrerregulación existente en el ámbito industrial, y mejore la eficacia y eficiencia de las normas en vigor y futuras mediante la realización de evaluaciones de impacto rigurosas.
- Debe priorizarse, por parte del Gobierno, la ORDENACIÓN Y CONTROL DE MEDIDAS DE CARÁCTER FISCAL, especialmente las de carácter medioambiental que puedan provocar la ruptura de la unidad del mercado, distorsionar la libre competencia y mermar la competitividad de nuestro tejido industrial.
- Debe promoverse una POLÍTICA DE INVERSIÓN, INTERNACIONALIZACIÓN y COMERCIO EXTERIOR que asuma los objetivos de atracción de inversiones productivas industriales en nuestro territorio y facilite la penetración de la producción española en mercados exteriores. España debe mantener en el ámbito europeo la necesidad de reforzar los instrumentos de defensa comercial de forma que se garantice, por una parte, el acceso a los mercados exteriores y, por otra, evite la competencia de importaciones desleales. España instará a la Unión Europea para que en los nuevos acuerdos comerciales se incluyan los criterios éticos, de defensa de los derechos humanos, de los Principios y Derechos Fundamentales del Trabajo, y del compromiso con la lucha contra el cambio climático en el alcance de los mismos.
- Para facilitar la FINANCIACIÓN Y POTENCIACIÓN DEL TEJIDO INDUSTRIAL, es necesario incrementar la dotación y articular más eficazmente los instrumentos nacionales y comunitarios de apoyo a la inversión en proyectos innovadores generadores de empleo, así como orientarlos fundamentalmente a la Pequeña y Mediana Empresa.
- Es preciso impulsar la SOSTENIBILIDAD INDUSTRIAL y su contribución continua al desarrollo de procesos, productos y bienes cada vez más sostenibles y comprometidos con la seguridad y la protección del medio ambiente de forma general y, particularmente, con las estrategias de mejora de la eficiencia energética, de la lucha contra el cambio climático y de la economía circular. Asimismo, y con objeto de promover la sostenibilidad de modo global, debe simultáneamente salvaguardarse la competitividad de las empresas industriales radicadas en nuestro país para evitar su relocalización en lugares donde la producción se realiza con estándares de seguridad y protección medioambiental sensiblemente inferiores a los europeos.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios