El movimiento de China en mayo de este año para reducir los subsidios a los proyectos solares a gran escala domésticos beneficiará en última instancia a los desarrolladores en EEUU que dependen de los paneles importados para reactivar proyectos y empleo, dice la firma de análisis y datos GlobalData.
Los desarrolladores de energía solar en EEUU han tenido problemas desde principios de 2018 debido a dos decisiones políticas anunciadas en EEUU y China. En enero de 2018, el gobierno de Estados Unidos impuso aranceles del 30% a las importaciones de productos solares para salvaguardar los intereses de los fabricantes locales.
Mohit Prasad, analista de energía en GlobalData, dice: “Debido a los mayores costos de las importaciones, muchos desarrolladores anunciaron la cancelación de sus proyectos. Algunos desarrolladores incluso iniciaron negociaciones para reestructurar sus acuerdos de compra de energía debido a los mayores costes derivados de las tarifas”.
Los desarrolladores de energía solar a gran escala como Cypress Creek Renewables y Southern Current cancelaron o aplazaron proyectos por un valor de más de 2.500 millones de dólares.
Según la Administración de Información de Energía (EIA) de EEUU, la industria solar estadounidense emplea a más de 250.000 personas, aproximadamente el 40% en el sector de la instalación y el 20% en el sector manufacturero. Dado que la mayoría de ellos estaban empleados por desarrolladores de proyectos, la industria comenzó a recortar empleo después de la implementación de los aranceles de importación.
Por otro lado, en mayo de 2018, China, que ha estado luchando para construir infraestructura para vincular los proyectos solares a la red, anunció un recorte en el subsidio de alimentación en las tarifas para reducir el aumento en las instalaciones solares.
Prasad añade: “Los recortes de subsidios en China han derivado en una reducción de la demanda de productos solares en el país. Posteriormente, se espera que el mercado mundial sea testigo de un exceso de suministro de paneles solares, lo que reducirá los precios”.
Los fabricantes chinos locales ahora están buscando exportar más paneles, lo que dispara la oferta en el mercado global de módulos solares fotovoltaicos (PV), lo que reducirá aún más los precios.
Como resultado, los desarrolladores como Inovateus Solar se han vuelto más optimistas. La compañía ha cerrado un acuerdo para desarrollar una planta de energía solar fotovoltaica de 6 megavatios (MW) en la ciudad de Pratt, Kansas. Pine Gate Renewables, un instalador solar con sede en Carolina del Norte, ha dado la bienvenida a la medida, ya que los precios más bajos ayudarán a la economía de los proyectos que ya se encuentran en trámite.
Prasad concluye: “Tras el anuncio hecho en China, muchos desarrolladores reavivarán sus planes de contratación y la industria será testigo de un aumento del empleo. Por lo tanto, la caída de los precios a nivel mundial y en EEUU ayudará a los desarrolladores a reactivar los proyectos y trabajos que quedaron en suspenso tras la aplicación de los aranceles de importación”.