El Gobierno marroquí dijo que revisará al alza su ambicioso plan de energías renovables para superar el objetivo de que el 52 % de la producción de su energía proceda en 2030 de energías limpias.
El anuncio lo hizo la ministra de Transición Energética y Desarrollo Sostenible, Leila Benali, en una comparecencia anoche en una sesión plenaria en la Cámara de Representantes (baja) del Parlamento marroquí.
La ministra detalló que actualmente hay 61 proyectos en curso de realización con una capacidad total de 4,6 gigavatios con una inversión total de 53.000 millones de dirhams (550 millones de euros).
Al mismo tiempo añadió que hay una serie de iniciativas y programas para apoyar la inversión en las energías renovables, citó entre ellas proyectos de energía solar fotovoltaica de una capacidad de 400 megavatios en favor de pequeñas y medianas empresas, y la alimentación de las plantas desaladoras de agua del mar en Dajla en el Sáhara con energía renovable.
Benali también mencionó un programa de alimentación de la zona industrial de Kenitra (centro) con energía eléctrica limpia con una capacidad de 160 gigavatios por hora.
La ministra se refirió también al cierre el pasado diciembre del gasoducto Magreb Europa que suministraba gas natural argelino a España y que pasaba por el territorio de Marruecos, país que recibía hasta entonces este combustible a través de este tubo antes de su cierre como consecuencia de la ruptura de relaciones entre Rabat y Argel.
La ministra indicó que el cierre de este gasoducto supuso “una oportunidad para una revisión global de la hoja de ruta del gas natural“, un producto que consideró esencial para el desarrollo de las energías renovables, y el desarrollo industrial y logístico del país.
Benali informó de que desde noviembre pasado más del 80 % de la demanda en energía eléctrica fue cubierta por el carbón, fuel y diésel.