La Secretaria de Estado de Medio Ambiente ha formulado una declaración de impacto ambiental (DIA) desfavorable para dos de las cuatro plantas promovidas por Iberia Termosolar SL en Calzadilla de los Barros y Bienvenida (Badajoz), lo que supone que la potencia instalada se quedaría finalmente en 224 megavatios (MW) en lugar de los 394,1 previstos.
A la vista de la propuesta de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental y Medio Natural, se ha rechazado el proyecto de ejecución de las plantas Calzadilla I y Calzadilla II de 50,1 y 120 MW de potencia, respectivamente, lo que suma 170,1 megavatios.
Según la resolución que publica hoy el Boletín Oficial del Estado, la decisión se basa en que estas dos plantas previsiblemente causarán efectos negativos significativos sobre el medio ambiente, y que las medidas previstas por el promotor no son una garantía suficiente de su completa corrección o su adecuada compensación.
Medio Ambiente considera que existen potenciales impactos adversos significativos sobre varias especies de fauna amenazadas incluidas en el Listado de Especies en Régimen de Protección Especial, Catálogo Español de Especies Amenazadas y Catálogo Regional de Especies Amenazadas de Extremadura.
En concreto, habla de avutarda, sisón, aguilucho cenizo y cernícalo primilla, entre otras.
La DIA también advierte de la destrucción o deterioro de lugares de reproducción de especies como avutarda, sisón y aguilucho cenizo, prohibidas por el artículo 57 de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, de Patrimonio natural y Biodiversidad.
Según la resolución, el planteamiento y valoración de alternativas no ha sido correcto.
“El desarrollo del potencial solar de la región, con un impacto muy favorable, tanto desde el punto de vista ambiental como socioeconómico, no debe realizarse a costa de degradar la riqueza natural y paisajística del entorno”, argumenta Medio Ambiente.
Sin embargo, la Secretaria de Estado de Medio Ambiente sí ha formulado la declaración de impacto ambiental favorable a las plantas Calzadilla III y Calzadilla B, así como a los tramos de línea de evacuación correspondientes.
La primera de ellas es de 74 MW de potencia y la segunda, en el término municipal de Bienvenida, de 150 MW, lo que suma 224 megavatios.
En este caso se considera que queda adecuadamente protegido el medio ambiente y los recursos, siempre que se realicen la alternativas seleccionadas en las condiciones de la presente resolución, que resultan de la evaluación practicada.
Para estas dos, Medio Ambiente establece 65 condiciones para su ejecución: de carácter general, para las fases de construcción y explotación, y de seguimiento ambiental.
Entre las generales, deberá ejecutarse una batería de sondeos mecánicos bajo supervisión técnica, y de acuerdo a la metodología prevista por la Dirección General de Patrimonio Cultural, con el fin de delimitar con mayor precisión la existencia de estructuras arqueológicas en el subsuelo correspondiente a los yacimientos “Cortijo de San Antonio”, situado a 79 metros de un apoyo de la línea eléctrica, y “La Tosca” (en caso de coincidir con el trazado de la línea eléctrica), estableciéndose un perímetro de protección con un radio de 200 m.
En caso que el resultado de los sondeos fuera positivo, se procederá a la exclusión de dichas áreas junto a su perímetro de protección del proyecto, o a la excavación arqueológica de los restos localizados, con objeto de delimitar la extensión del yacimiento, caracterizar el contexto de los hallazgos, recuperar estructuras conservadas, conocer la funcionalidad de sus distintos elementos y establecer tanto su encuadre cultural como su enmarque cronológico.
En el área de implantación de Calzadilla B deberá llevarse a cabo un muestreo específico previo de sapillo pintojo ibérico (Discoglossus Galganoi), así como la identificación de posibles lugares de reproducción, que deberán ser señalizados y no serán alterados.