Mingyang Smart Energy Group se convertirá en el primer jugador chino en suministrar turbinas para un parque eólico marino en Japón, ya que los equipos más baratos ayudan a reducir los obstáculos para los nuevos proyectos de energía renovable del país.
Mingyang llegó recientemente a un acuerdo para proporcionar tres turbinas de 3 megavatios para una instalación de energía eólica frente a la costa de Nyuzen, una ciudad en el centro de Japón. La compañía pronto firmará un contrato formal con el contratista general Shimizu Corp. y buscará la certificación de terceros para su equipo, dijo una fuente familiarizada con el asunto.
El tamaño del acuerdo no se ha hecho público.
Programado para comenzar a operar el próximo año, el proyecto Nyuzen está a cargo de un consorcio liderado por la empresa de energía renovable Venti Japan. Las turbinas se instalarán a unos cientos de metros de la costa, lo que significa que se pueden fijar al fondo del mar en lugar de plataformas flotantes.
Esto presenta la posibilidad de que la compañía tenga acceso para recopilar datos sobre corrientes de viento y oceánicas que están vinculadas a las defensas de Japón, un tema que ha generado preocupación a medida que los países protegen más los datos relacionados con la seguridad nacional y la competitividad económica, especialmente debido al aumento de las tensiones entre EEUU y China.
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