Repsol "no siente presión alguna" en el marco del proceso de desinversiones planteado en su plan estratégico y confía en lograr su objetivo de 6.200 millones en ventas en el horizonte de 2020 a pesar del entorno complicado de precios del crudo.
En una conferencia con analistas, el director financiero de Repsol, Miguel Martínez, ha recordado que la petrolera ha realizado desinversiones por valor de 10.000 millones en los últimos tres años con notables plusvalías y no ve "problemas" para lograr su nuevo objetivo incluso en un escenario de precios bajos del crudo.
"No sentimos presión alguna en la venta de activos (...) aún no ha comenzado el periodo del plan estratégico y ya hemos cerrado ventas", ha subrayado.
Repsol anunció el pasado octubre un plan estratégico que, entre otras medidas, preveía 6.200 millones en desinversiones entre 2016 y 2020 en activos no estratégicos y no vinculados directamente al precio del petróleo.
La cartera total de activos de Repsol suma unos 44.000 millones.
Martínez ha señalado ante los analistas que espera cerrar en 2016 la venta del negocio de distribución de gas canalizado que aún mantiene.
En septiembre, Repsol acordó con Gas Natural Distribución y con Redexis Gas la venta de activos de gas canalizado por 652 millones.
Tras esta operación, mantuvo una cartera de instalaciones de gas canalizado con capacidad de suministro para 141.535 clientes de la que también quiere desprenderse.
El resto del negocio, ha subrayado Martínez, se considera "core business" y se mantendrá como está.
Martínez ha apuntado que una vez se consiga una calificación crediticia BBB "no tendría sentido mantener el "scrip dividend" aunque no cree que esto pase en el horizonte de los próximos dos años.
Repsol ha comunicado hoy las cifras de los nueve primeros meses con un beneficio neto de 832 millones, un 49,5 % menos que en el mismo periodo de 2014, lastrado por los bajos precios del crudo.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios