Desde hace más de una década Reino Unido quiere desarrollar el mayor parque eólico terrestre del país, el Viking Energy, en la remota isla de Shetland pero no termina de salir adelante. Después de muchos obstáculos legales, oposición de los defensores del medio ambiente y de muchas decisiones judiciales, ahora Wind Farm, el desarrollador del parque, tendrá que esperar un poco más para saber si se le otorgará las ayudas gubernamentales a través de la fórmula que es utiliza en el país anglosajón, el esquema de Contratos por Diferencia (CfD).
Los resultados de los CfD del Gobierno del Reino Unido para proyectos de electricidad con bajas emisiones de carbono, que podrían allanar el camino para el controvertido proyecto, ahora deben esperar nuevamente hasta el 19-20 de septiembre como muy pronto tras un desafío legal al proceso de licitación.
Inicialmente, el anuncio debía haberse presentado a finales de agosto pero Banks Renewables de Durham ha conseguido en los tribunales que se haya extendido la fecha de cierre de las ofertas.
Banks Renewables argumenta que los parques eólicos terrestres aceptados deberían haberse incluido en la última ronda de CfD pero que en la última subasta en particular, solo se podían otorgar a proyectos eólicos offshore consentidos y a parques eólicos remotos.
El Departamento de Estrategia Comercial, Energética e Industrial de Reino Unido ha explicado por su parte que “hemos respaldado la inversión de 490 millones de libras anuales en tecnologías renovables y más del 50% de nuestra energía proviene de fuentes bajas en carbono, una parte vital de nuestro objetivo para convertirnos en una economía neta de emisiones cero en 2050", por eso, "creemos que hemos ejecutado el esquema legalmente e impugnaremos esta decisión".
El plazo para las ofertas se ha extendido hasta el 29 de agosto como resultado de la acción legal.
Se espera que una oferta exitosa del proyecto Viking Energy, controlada por Scottish & Southern Energy, de como resultado la construcción de un cable de interconexión submarino que obtenga la aprobación necesaria para permitir que grandes proyectos renovables como el parque eólico exporten energía al sistema nacional.
El esquema CfD es el mecanismo principal del gobierno para apoyar el despliegue de la nueva generación de electricidad baja en carbono, con el objetivo de reducir el desembolso de capital para los desarrolladores y minimizar el costo para los clientes.
Una vez que los ganadores de la subasta CfD comienzan a generar electricidad, se les paga la diferencia entre el "precio de ejercicio", que está determinado por la subasta competitiva, y el "precio de referencia", una medida del precio mayorista en el mercado británico, por cada Unidad de electricidad verde exportada.
Los trabajos de investigación en tierra de Viking Energy comenzaron en julio para aconsejar la planificación del desarrollo principal, y la construcción del parque eólico está programada para comenzar en mayo de 2020 o antes.
Sin embargo, el grupo de campaña Sustainable Shetland ha expresado su preocupación por el impacto que el trabajo de campo está teniendo en el medio ambiente local, mientras que también se han planteado preguntas sobre si se han establecido todos los consentimientos necesarios para hacer el trabajo, lo que lleva al Consejo de las Islas Shetland ha buscar asesoramiento legal.
Jaume Morron
16/08/2019