La Comisión de Industria y Energía del Congreso ha aprobado con el voto a favor de todos los partidos, menos el PP, una proposición no de ley que aboga por el cierre definitivo de la central nuclear de Garoña (Burgos), y la puesta en marcha de un plan de reactivación económica en la zona.
La iniciativa ha salido adelante con 28 votos a favor y 15 en contra.
El texto de la proposición (impulsado por Podemos y transaccionado por el PSOE y Ciudadanos) también hace referencia a la necesidad de promover un pacto de Estado para transitar hacia un nuevo modelo energético, basado en las renovables y en la eficiencia y el ahorro energética.
El diputado de Podemos Juan López de Uralde ha recordado que Garoña es la planta más antigua del parque nuclear español, que en 2011 cumplió 40 años y que aunque tiene permiso para operar hasta 2013 lleva cerrada tres años "sin que haya habido ningún tipo de problema de abastecimiento energético".
"Garoña es prescindible, su cierre no ha condicionado el abastecimiento", ha destacado.
López de Uralde ha sostenido que, en su empeño de reabrir Garoña, la industria nuclear española "experimenta" con el Gobierno y con el órgano regulador del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) sobre cómo "alargar la vida de las nucleares hasta los 60 años".
"Garoña ya cumplió y lleva cuatro años sin actividad sin perjuicio para el suministro eléctrico", ha dicho también Enrique Bueno, diputado de Ciudadanos, quien ha apostado por un pacto de estado de energía con la participación de todas las fuerzas políticas y agentes económicos.
Ese pacto debe apostar por una transición hacia un modelo basado en las renovables, en el autoabastecimiento, el ahorro y la eficiencia, ha agregado el diputado de Ciudadanos.
En la misma línea se ha pronunciado la diputada socialista, Adriana Lastra, quien ha subrayado que Garoña no es "ni necesaria, ni barata ni garantiza la seguridad".
Por su parte, el diputado del PP, Juan Bravo ha justificado el rechazo de su grupo a la iniciativa hablando de la importancia de Garoña para la comarca de Burgos en la que se ubica, y ha dicho que el PP está a favor de que opere siempre que se cumplan todos los criterios de seguridad que le imponga el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).
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