El crudo barato ha roto los esquemas de todas las compañías de hidrocarburos del planeta. Quien más y quien menos ha tenido que revisar su plan estratégico, ha tenido que recortar plantilla, paralizar proyectos, inversiones, o incluso cerrar el chiringuito porque las deudas ahogaban.
Ante el exceso de producción de crudo, y que a los actuales niveles del precio del petróleo no salen las cuentas para explorar y producir oro negro, las compañías han decidido cerrar el grifo y esperar a otro momento para perforar el suelo o el lecho marino.
La guerra abierta por Arabia Saudí contra el fracking estadounidense ha hecho estragos en la industria petrolera norteamericana. El crudo barato ha colapsado la exploración de hidrocarburos en el país.
Según datos de Baker Hugues, el número de plataformas perforadoras activas en todo el territorio de EEUU se ha desplomado hasta niveles históricos. La semana pasada, el total de plataformas perforadoras activas era de 489 en EEUU, su segundo nivel más bajo de la serie histórica (Baker Hugues ofrece estos datos desde 1975). A solo una plataforma del récord más negativo que es de 488 en abril de 1999. Es el peor dato de los últimos 17 años, cuando aún no existía el fracking.
El récord absoluto de perforadoras en EEUU data del año 1982 cuando hubo esa fiebre por el oro negro y había en funcionamiento más de 4.500 perforadoras.
Sin duda alguna, este dato es un ejemplo de lo que está sucediendo en el sector petrolífero. Si EEUU se ha colapsado, el dato internacional también es para tenerlo en cuenta.
El número de perforadoras en todo el mundo ha caído a niveles de mayo de 2002. Según los datos de febrero, el total de perforadoras en el mundo es de 1.761 plataformas.
Un año antes, la cifra era de 2.900 plataformas. Y en febrero de 2014, el número era de 3.700 perforadoras. En solo dos años se ha perdido más de la mitad de la actividad de exploración de hidrocarburos en el mundo.
Tras EEUU que tiene 489 plataformas, le sigue Oriente Medio, con 404 plataformas, Latinoamérica (237), Asia Pacífico (182), Europa (107) y África (88).
La crisis es evidente. La actividad perforadora se ha paralizado en todo el mundo. Lo peor para las empresas es que todo indica que el cierre de proyectos irá en aumento en las próximas semanas y se verán niveles de exploración nunca vistos.
En EEUU dicen que este número tan bajo de plataformas no se veía desde 1860, más de 150 años, cuando el oro negro comenzó a dar sus primeros pasos en Pensilvania.
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