Alemania no alcanzará su objetivo de renovables para 2030 si no cambia las políticas actuales

El nuevo informe, REmap Germany, encargado por el Ministerio Federal de Economía y Energía (BMWi), y realizado por la Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena), mira a la transición energética alemana – la Energiewende- que apunta a incrementar la participación de las energías renovables en la energía final bruto del país hasta el 30%, cuando en 2014 era del 13,5%.

Irena plantea dos escenarios para el Energiewende: en el primero de ellos las energías renovables alcanzarían una cuota del 27% de la energía final bruta; en el segundo (REmap 2030), podrían llegar al 37%, que supondría una revisión de los objetivos. La cuestión de si se logra alcanzar el objetivo o no se reduce a una mera cuestión política, es decir, si las políticas actuales no cambian, no se cumplirán los objetivos, o superaron.

Superar los objetivos

Bajo el escenario de REmap 2030, Irena estima  que hay potencial para un desarrollo adicional de energía renovable si se desarrollan las tecnologías disponibles en la actualidad. En concreto, las energías renovables en aplicaciones de uso final (por ejemplo, bombas de calor o vehículos eléctricos) necesitan ser tenidas más en cuenta. En general, los autores del informe consideran que el mayor potencial para el desarrollo de las energías renovables se encuentra en los sectores de la calefacción y el transporte. (Ver gráfico)

"Estos sectores, sin embargo, también se enfrentan a los mayores desafíos para su  implementación, en especial debido a que el enfoque de las políticas en estas áreas sigue siendo muy limitado, y para avanzar es necesario un mayor crecimiento en el despliegue de las fuentes renovables”, dice el informe.

La biomasa jugará un papel integral, dice Irena, aunque la disponibilidad de recursos será un reto. Otro desafío radica en el sector de la energía que, bajo el escenario REmap 2030, contempla que la mitad de toda la producción de electricidad será generada por la eólica y la fotovoltaica, las cuales siguen siendo, hoy por hoy, muy variables.

Almacenamiento

Como tal, la flexibilidad en la integración en la red de la energía renovable es clave, al igual que la gestión de la demanda y del almacenamiento de energía. En el punto de almacenamiento, Irena afirma que el almacenamiento a gran escala podría no ser necesario para 2030 - según se recoge en muchos informes el almacenamiento es importante en este nivel solo cuando las energías renovables han alcanzado una penetración del 65% -, pero en su lugar las aplicaciones de almacenamiento en las instalciones residenciales más pequeñas  si serán un foco de crecimiento.

En el escenario REmap 2030, Irena pronostica que se desplegarán  11 GW de almacenamiento + solar residencial en Alemania hasta 2030 (las últimas cifras indican que un 12% de los sistemas fotovoltaicos en Alemania se instalan con almacenamiento, dice Irena), mientras que el total acumulado capacidad fotovoltaica llegará a los 75 GW. En el escenario de referencia, el informe no menciona el almacenamiento, pero dice que la capacidad instalada será de alrededor de 62 GW.

"El almacenamiento de la electricidad es en la actualidad una de las opciones de flexibilidad más caras. Su implementación debe seguir la de otras opciones de flexibilidad, como la expansión de la red, interconexiones y gestión de la demanda", afirma el informe, que añade: "Sin embargo, la importancia del almacenamiento se apreciará con mayor claridad cuando Alemania comience a llegar a niveles muy altos de energía renovable después de 2030. El Instituto Fraunhofer de Sistemas de Energía Solar, al estimar el almacenamiento necesario para lograr el 100% de energías renovables en Alemania en 2050, llegó a la conclusión de que este almacenamiento se elevaría a 24 GWh de aplicaciones de baterías estacionarias, 60 GWh de hidráulica de bombeo, 33 GW de electrolizadores y 670 GWh de almacenamiento de calor.

Costes

En cuanto a los costes, Irena presenta dos escenarios muy diferentes, a pesar de que la Energiewende dice que requerirá una inversión promedio anual en energías renovables de 15.700 millones de dólares hasta 2030 en ambos casos. Desde una perspectiva empresarial, el informe señala que Alemania ahorraría 2.400 millones al año para el 2030. "Esto lo hace más convincente para un mayor despliegue de renovables", dice el informe.

Visto desde una perspectiva del Gobierno, las energías renovables costaría alrededor de  4.000 millones al año. Sin embargo, si se implementan todas las opciones del escenario REmap 2030, Irena considera que los costos totales de la importación de combustibles fósiles en Alemania se reducirían en casi 30.000 millones al año para el 2030.

Por lo tanto, "el beneficio total de este escenario sería de entre 33.000 y 40.000 millones de dólares al año en 2030, cantidad muy superior a los costes totales del sistema de 4.000 millones cuando se ve desde la perspectiva del Gobierno." Y no sólo eso, sino que un alejamiento de los combustibles fósiles puede ayudar a reducir los impactos negativos en la salud y aumentar el crecimiento económico.

Superar el objetivo del 30% será "óptimo en costes en función de cómo se valoren los beneficios ambientales de las tecnologías individuales y si los costes se ven desde un punto de vista empresarial o desde la óptica del Gobierno". Mientras que muchas tecnologías se consideran más caras que sus homólogas de combustibles fósiles, Irena afirma que son activadoras, lo que resultará más rentable a largo plazo.

A través de su Energiewende, Alemania es reconocida a nivel mundial como líder en la integración de las energías renovables en su sistema eléctrico. Su Ley de energías renovables es un punto de referencia para el desarrollo de las energías renovables en muchos mercados y, en particular, para las industrias solar y eólica. El informe dice que para que la UE cumpla sus objetivos de energía renovable para 2020 y más allá, "Alemania debe seguir desempeñando un papel de liderazgo en la expansión de las energías renovables".