La Comisión Europea acaba de publicar el 3º Informe sobre precios y costes de la energía en Europa en el que realiza un análisis detallado de los componentes de los precios en la UE en 2017 para consumidores residenciales e industria de electricidad, gas y derivados del petróleo.
Entre sus principales conclusiones, los precios medios residenciales en la UE descendieron un 3% en 2017. Es la primera vez que caen desde 2008. En el caso de España los precios residenciales son los quintos más caros de la UE tras Alemania, Dinamarca, Bélgica y Portugal.
Pero si a estos le quitas el componente impuestos (color verde) se observa que España estaría más o menos en la mitad de la tabla de los 32 países europeos analizados [ver línea roja] y en línea con la media europea. (Ver gráfico).
En cuanto a los componentes del precio de la electricidad, “impuestos y otros” supone un 40% de los precios residenciales en la UE (energía 35% y redes 25%). En el caso de Alemania, Dinamarca y Portugal este porcentaje de impuestos se va por encima del 50%. En España este componente se sitúa ligeramente por debajo del 50%.
El informe muestra también los precios en la industria donde España sale bien parada ya que el precio de la electricidad se sitúa por debajo de la media de la UE.
Asimismo, el informe señala que la caída del coste de las tecnologías renovables permitirá en el futuro seguir reduciendo los apoyos a estas tecnologías. Así como que el nivel bajo de precios en los mercados mayoristas que se esperan para los próximos años no permitirán a las térmicas recuperar sus costes.