Los altos precios de la energía en Reino Unido han puesto en jaque a medio sector eléctrico. Tal es el problema, que el Gobierno de Boris Johnson, baraja la posibilidad de crear un banco malo con aquellas comercializadoras de luz y gas que están en absoluta quiebra por esta crisis de precios energéticos.
El Secretario de Estado de Negocios, Energía y Estrategia Industrial, Kwasi Kwarteng, ha hablado ante el Parlamento británico para explicar la complicada situación que están viviendo buena parte de las compañías del sector.
Pero de momento, la solución de crear un banco malo para acoger a estas compañías quebradas sólo está sobre la mesa. La intención del Gobierno británico es que caigan estas comercializadoras, eso sí, siempre asegurando el suministro tanto de electricidad como de gas a los consumidores.
"Los consumidores son lo primero", ha dicho Kwarteng.
Hasta ahora han quebrado unas seis comercializadoras, pero es posible que en los próximos días esta cantidad de empresas se multiplique y sean decenas de compañías del sector quebradas.
https://elperiodicodelaenergia.com/se-encienden-las-alarmas-en-europa-los-altos-precios-energeticos-se-llevan-por-delante-las-primeras-comercializadoras-en-reino-unido/
El Gobierno espera que es to no suceda porque entonces tendrá que tomar cartas y probablemente aprobar la creación de este banco malo.
La quiebra de estas compañías podría dejar a millones de británicos sin suministro, aunque el Ejecutivo de Boris Johnson está preparado para actuar.
Kwarteng ha asegurado que no existe problemas de suministro de gas en Reino Unido pero que la crisis de precios altos les afecta de lleno.
También ha asegurado el encargado de Energía que el límite del precio de la energía, que todavía ahorra a 15 millones de hogares hasta 100 libras al año, no va a desaparecer.
Como resultado de los altos precios mundiales del gas, dos plantas de fertilizantes cerraron en Teesside y Cheshire la semana pasada. Suspendieron la producción de CO2 y la amoniaco. Una decisión que ha afectado a corto plazo al suministro interno en los sectores de alimentación y bebida, así como a los sectores nuclear y sanitario.
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