BMW quiere presentar un coche con baterías de estado sólido antes de 2025

El desarrollo de los próximos vehículos eléctricos ya ha comenzado. La mayoría de fabricantes busca ser lo más eficiente posible para así conseguir el objetivo de ser neutrales en carbono antes de la mitad de la década. Mercedes-Benz ya lo confirmó hace unos días tras su acuerdo con Hydro para el suministro de aluminio con bajo impacto en carbono. En el caso de BMW, la firma de Múnich nos mostró recientemente las primeras especificaciones de su nueva batería cilíndrica.

Sin embargo y de manera paralela, la propia marca muniquesa acaba de anunciar que ha reforzado su asociación con la empresa Solid Power Inc., con sede en Colorado, con la que colabora desde 2017 para el desarrollo y posterior uso de baterías de estado sólido. La firma alemana invertirá 20 millones de dólares (18,87 millones de euros) hasta el verano de 2024 por la patente tecnológica, en la que se incluyen la experiencia en diseño y fabricación de electrodos de estado sólido de la compañía. La compañía norteamericana conservará su propiedad intelectual sobre el material electrolítico que ha desarrollado.

Para muchos, las baterías de estado sólido son la próxima frontera que han de derribar los vehículos eléctricos pues prometen reducir drásticamente los costos, aumentar la velocidad de carga e incrementar considerablemente la autonomía, todo ello sin obivar que son más seguras y más sencillas de producir. De esta forma, BMW se ha comprometido a mostrar un prototipo efectivo que emplee dicha tecnología para antes de 2025.

“Esperamos trabajar aún más de cerca con Solid Power para integrar en nuestras propias instalaciones la producción de celdas de estado sólido basadas en los diseños de Solid Power”, confirmó Frank Weber, miembro de la junta directiva de BMW._ “Esperamos que este acuerdo acelere la instalación de nuestra línea de prototipos de estado sólido y el objetivo mutuo de nuestras empresas de comercializar esta prometedora tecnología celular”_.