Cataluña saca pecho con el autoconsumo pero sigue poniendo trabas a los grandes proyectos de renovables

Cataluña ya dispone de 4.474 instalaciones de autoconsumo a partir de energía fotovoltaica, que suman un total de 55,85 MW de potencia. La instalación de este tipo de sistemas ha crecido de manera muy significativa a partir del año 2019, en el que cada trimestre se han puesto en marcha un 52% más de equipos de autogeneración que en el trimestre anterior, según datos  del Observatorio del Autoconsumo en Cataluña, que ha puesto en marcha del Instituto Catalán de Energía (ICAEN).

Así, entre abril y junio de 2020, y a pesar de las semanas de confinamiento, la comunidad autónoma ha registrado 1.457 nuevas instalaciones de autoconsumo fotovoltaico, con una potencia total de 12,06 MW.

La gran mayoría de estas instalaciones corresponden al ámbito doméstico. De hecho, un 73% tienen una potencia igual o inferior a 5 kW, mientras que sólo el 7,2% corresponde a grandes instalaciones por encima de 25 kW, más propias de instalaciones asociadas al sector industrial o servicios.

"Estas cifras reflejan que los ciudadanos y las empresas de Cataluña han hecho suya la apuesta por una transición hacia un nuevo modelo energético más limpio, sostenible y democrático enseguida que han tenido un marco jurídico favorable", afirma la Generalitat. De hecho, en el año 2019 el Gobierno eliminó las barreras legales a la práctica del autoconsumo, y la Generalitat fue pionera en simplificar los trámites administrativos y urbanísticos para estas instalaciones mediante el Decreto ley 16/2019.

"El autoconsumo fotovoltaico es una de las piezas fundamentales del modelo energético del futuro, ya que permite que el ciudadano genere, gestione y consuma su propia energía, y que ésta provenga de fuentes renovables con un impacto mínimo sobre el medio ambiente".

Sin embargo, este boom de instalaciones de autoconsumo no se está produciendo con las plantas a gran escala de renovables. Y sin este tipo de instalaciones es imposible que Cataluña logre cambiar su modelo energético como pretenden.

Este diario ya ha denunciado en más de una ocasión las trabas que se están poniendo a los proyectos de renovables. Por un lado, está el departamento de Agricultura que ha conseguido tirar atrás la mayoría de proyectos fotovoltaicos a través de la Ponencia de Renovables.

Por otro lado, está la situación política en Cataluña donde ERC le está echando un pulso a Junts per Cat por las renovables y ha llamado a sus ayuntamientos en la región para tumbar los grandes proyectos e incluso tratar de echar por tierra el decreto de renovables que ellos mismos aprobaron.