Es complicado poder predecir cuáles van a ser los precios de la energía en los mercados mayoristas para el día siguiente, imagínense si la pregunta es para todo un mes o incluso para todo el año. Pero eso es lo que muchos de ustedes se preguntan. ¿Cómo van a ser el precio de la electricidad y del gas durante este 2022? ¿Cómo se va a comportar? ¿Irá a mejor? ¿O a peor?
Y se lo hemos preguntado a quien más sabe de esto en nuestro mercado, a representantes de las tres principales consultoras en previsión de precios que hay en nuestro mercado: Antonio Delgado (Aleasoft Energy Forecasting), Javier Revuelta (AFRY Management Consulting) y Kim Keats (EKON Consulting).
Los tres coinciden en algo, que es harto complicado saber lo que va a suceder. "Atinar los precios de la energía (gas y electricidad) en este 2022 no precisa de buenos analistas energéticos, sino de buenos analistas geopolíticos y buenos meteorólogos", afirma Revuelta.
"La situación es muy compleja, inestable y volátil. De hecho, parece que está calando el término "macrovolatilidad"", asegura Delgado. Es decir, que habrá fuertes subidas y bajadas en los precios en función de la producción renovable y la entrada de loss ciclos en el mix.
"Con tanta volatilidad, hay que ser lo suficientemente sabios para aceptar que no lo sabemos todo", sentencia Kim Keats. "Pero dentro esta incertidumbre, lo más probable es que el precio de la luz sea más alto en el 2022 que en 2021".
Keats cree que hay dos factores a tener en cuenta. Por un lado, la entrada de renovables al mercado y por otro el precio del gas y del CO2. "Si aciertas estos precios, saldrás premiado", dice.
También piensa Antonio Delgado, director general de Aleasoft Energy Forecasting, que los precios irán al alza durante este próximo año, en base a que seguirán altos los precios del gas y que el CO2 seguirá su tendencia alcista.
"La mayor probabilidad la vemos en que los precios continúen altos y con algo de probabilidad de que puedan subir algo más dependiendo de las condiciones meteorológicas durante el invierno en los países centrales de Europa. También existen probabilidades que los precios bajen, pero que eso ocurra antes de la primavera es muy poco probable. En el caso del CO2, la tendencia en el medio y largo plazo es claramente al alza, a no ser que la Unión Europea intervenga en ese mercado", explica Delgado.
"Para los mercados de electricidad, todos los mercados de Europa, 2022 será un año caro. Los precios seguirán la tendencia de los precios del gas. Es decir, estarán altos durante el invierno y pueden empezar a bajar a partir de la primavera, si bien los niveles anteriores a la subida y anteriores a la pandemia, los niveles de 2018-2019, no se recuperarán hasta, al menos, 2023, y dependerá, entre otros aspectos de cómo avance la instalación de nueva capacidad renovable.
En resumen, lo que estamos seguros que podemos esperar de 2022 son precios altos en el conjunto del año y una situación de macrovolatilidad en los mercados de electricidad, tanto spot como futuros".
Por si quieren coger papel y boli, apunten. Algunos intervalos de precios para 2022 para Aleasoft:
Gas: 96-100 €/MWh
CO2: 80-90 €/t
Mercados electricidad:
Ibérico: 125-160 €/MWh
Francia: 170-200 €/MWh
Alemania: 140-180 €/MWh
Sin embargo, Javier Revuelta, Senior Principal de AFRY Management Consulting, ve el vaso medio lleno, es decir, que espera mejores precios, más baratos, para este 2022.
"Será con toda probabilidad un año de caídas de precio más o menos opuestas a las subidas sufridas durante 2021, a medida que volvemos hacia un mercado equilibrado. Porque volverá al equilibrio de oferta y demanda, de eso hay pocas dudas a pesar del consumo creciente de China tras una recuperación económica más rápida de lo esperado, y la pregunta es más bien en qué mes. Ojo porque, aunque no lo espero, aún pueden venir fuertes subidas de precio hacia final del invierno, tanto de gas como de electricidad. El bajo almacenamiento europeo con el que afrontamos el invierno ya augura que podría haber faltantes en algunos países de nuestro entorno hacia febrero o marzo, según el frío de los próximos meses y según la disponibilidad de gas de nuestros principales proveedores. Por otra parte, el tenso conflicto entre Rusia y Ucrania, así como en Polonia y Bielorrusia, podrían conllevar serias restricciones de aprovisionamiento para Europa, que pasaría a pagar precios muy altos para atraer el GNL disponible.
En general OMIP ha tendido más a sobreestimar que infraestimar en el pasado, y creo que este año no será una excepción. El desbalance entre oferta y demanda de gas que se ha producido en 2021, tanto por algo mayor consumo como sobre todo por indisponibilidades inesperadas por el lado de la oferta, ha sido muy bajo en comparación con la demanda mundial de gas; no hace falta un desajuste anual importante para que se alcancen precios muy elevados. Además sigue creciendo la capacidad de producción mundial, por lo que hay bastante consenso de que ese equilibrio se producirá entre 2023 y 2024, siendo cada vez más improbable que suceda en 2022. O sea que 2022 empezará muy caro todavía, y la demanda de gas se mantendrá alta mientras llenamos almacenamiento estacionales por llegar muy tiesos al final de este invierno.
Con todo, espero bajadas considerables, sobre todo si se confirma la entrada de Nord Stream 2 este verano, y una bajada de la tensión entre Rusia y Ucrania".
Pero Revuelta da otras claves. "Otro impacto del que hasta ahora no se ha hablado demasiado, es del apuntamiento solar en el MIBEL. Esperamos que en 2022 baje de 90%, y siga bajando los próximos años a un ritmo considerable por la entrada de nueva potencia solar año a año. Mientras los combustibles se mantengan altos, el apuntamiento no es tan crítico para las plantas con exposición merchant, pero a medida que bajan el gas y el apuntamiento solar, será preciso afinar las proyecciones de ingresos", asegura.
Por ello llega a esta conclusión final. "Parece difícil eso sí que en 2022 volvamos a un gas y electricidad mayorista baratos, pero sí en rito de bajada".
Por su parte, Kim Keats, socio de EKON Consulting, señala que "mientras las tecnologías de menor coste no sean capaces de suministrar toda la demanda, el coste de generación del ciclo combinado seguirá determinando el precio en los mercados mayoristas".
"En EKON, preparamos nuestro últimas proyecciones (para el informe trimestral del 2021Q4) con un precio de gas natural de 50EUR/MWh(f) y un precio de CO2 de 59EUR/tCO2. Esto nos da una proyección de 125EUR/MWh para el 2022 en el mercado mayorista". (Cabe recordar que 2021 ha finalizado con algo más de 111 €/MWh)
Aun así, no hay que fiarse mucho de lo que dicten los futuros, porque se trata más de sentimientos que de certidumbres. "Los mercados de futuros comparten una visión que es difícil de contradecir. Al fin y al cabo reflejan operaciones reales de agentes que gestionan sus riesgos. Pero esa misma volatilidad indica que nadie sabe con certidumbre a donde estaremos en el 2022. El contrato anual 2022 en OMIP está hoy 30 de diciembre a 214EUR/MWh que es consistente con precio de gas natural de 90EUR/MWh(f) y CO2 de 80EUR/tCO2 (90/50% +0.4*80=212) donde rondean los futuros del PVB y CO2 en ICE y MIBGAS respectivamente. El problema es que los precios de los futuros reflejan las preocupaciones de hoy y pueden cambiar radicalmente. El 22 de diciembre, el precio del contrato anual 2022 de gas natural europeo TTF en el mercado ICE estaba a 140EUR/MWh(f) y hoy está a 89EUR/MWh(f) mientras el PVB en MIBGAS estaba a 138EUR/MWh(f) y ayer cerró a 90EUR/MWh(f)".
Es decir, que todo se puede venir arriba o abajo dependiendo de lo que suceda en el campo geoestratégico y cómo no de lo que venga del cielo.
En definitiva, un 2022 muy complejo que traerá o mantendrá precios altos en los mercados mayoristas de electricidad y gas.
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