El Congreso de los Diputados ha puesto en marcha un plan de eficiencia energética y de sostenibilidad medioambiental que contempla medir la huella de carbono y reducir el consumo de energía y agua, así como impulsar el reciclado de los residuos, con la reducción del uso del papel y la eliminación del plástico.
En medio de la crisis energética derivada por la guerra de Ucrania y después de que la Comisión Europea haya acordado reducir un 15 % el consumo de gas pero con excepciones, el Congreso de los Diputados implementa ya el Plan de Sostenibilidad Medioambiental aprobado por la Mesa de la Cámara en abril para los próximos cuatro años.
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha incidido en que se puede ahorrar y reducir el gasto energético de forma inteligente y el plan de la Cámara Baja contempla desde el menor consumo del agua y la gestión de residuos hasta medidas en movilidad o en contratación sostenible de obras, servicios y compra de materiales.
Ejemplaridad en el ahorro energético
Para ello se ha creado en el Congreso el Área de Sostenibilidad Medioambiental que además de implantar las medidas en los diferentes edificios del Congreso también llevará un control.
En primer lugar se desarrollará una auditoría energética y se medirá la huella de carbono generada, además de que se solicitarán certificaciones y sistemas de compromiso con la gestión medioambiental, como los certificados ISO y BREEAM.
Desde 2015, los edificios del Congreso de los Diputados se abastecen en su totalidad con energía eléctrica 100 % renovable.
Para mejorar la eficiencia energética y reducir el consumo, el Plan contempla la sustitución de luces fluorescentes y halógenas por tipo LED y reducirá del uso de iluminación artificial mediante programadores horarios, con el apagado automático de espacios que no estén en uso.
También se reducirá el consumo de agua, con la instalación de contadores inteligentes y equipos de medición, sistemas de control de caudal o sistemas de doble descarga en los aseos y equipos de bajo consumo de agua en las cocinas.
¿Movilidad sostenible?
Asimismo se posibilitará la ventilación natural de los edificios y se racionalizará el uso del aire acondicionado, al tiempo que otro objetivo en la estrategia es reducir a cero el consumo de papel y eliminar los plásticos de un solo uso, sobre todo con envases reutilizables para bebidas y alimentos en la restauración.
Se generalizará el uso de medios telemáticos para trámites, comunicaciones internas y externas, publicaciones digitales o registro de iniciativas.
En torno a mejorar la movilidad sostenible la flota de vehículos del Congreso será de coches híbridos y eléctricos con etiqueta eco o cero emisiones y en el aparcamiento del Congreso se reservarán zonas exclusivas para las bicicletas.
Está previsto también elaborar un Plan de Transporte al trabajo que permita racionalizar los desplazamientos, que fomente la utilización de nuevos medios de transporte y desarrolle una estrategia de movilidad más sostenible.
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