Siemens Gamesa está viviendo una etapa convulsa para sus pocos meses de vida. Los resultados trimestrales no han sido tan buenos como se esperaban, su evolución en bolsa tampoco lo está siendo, y hace unas semanas anunció una reestructuración de plantilla, que supondrá el recorte de 6.000 empleos de los casi 27.000 con los que cuenta actualmente la empresa.
Y en medio de tanta confusion, el consejero delegado de la eólica, Marcus Tacke, ha participado en un debate sobre el futuro de las renovables, Energytalks, que organizaba EDP Renovable (EDPR) en Madrid. En su exposición, aprovechó para ensalzar el futuro de las renovables como las principales fuentes de generación en el futuro, ya que el debate sobre si éstas son mejor que los combustibles fósiles "está acabado". También recordó el liderazgo de su empresa en el mercado eólico tanto onshore y offshore y las grandes perspectivas que existen para desarrollar la tecnología a nivel mundial, "cada vez se construyen turbinas más grandes y eficientes", dijo.
El directivo de la eólica destacó el potencial de la digitalización para la industria de las renovables, que hará aún más eficiente el uso de los aerogeneradores con una mejor gestión para durar más, y así poder ampliar su vida útil con la consiguiente mayor rentabilidad para los propietarios de instalaciones. Por eso, dijo que la digitalización será la siguiente palanca para ayudar a reducir aún más el coste de la electricidad.
Pese a las grandes expectativas presentadas y a su visión optimista del futuro de la eólica, el CEO de Siemens Gamesa salió disparado del acto, casi 'a la carrera' y evitando a la prensa, ¿a qué no quería contestar Tacke?
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