Tras varios años de intenso trabajo, el CERN y sus socios internacionales han completado un estudio para evaluar la viabilidad de un posible Futuro Colisionador Circular (FCC). El informe, que refleja la experiencia de más de mil físicos e ingenieros de todo el mundo, presenta un resumen de los diferentes aspectos relacionados con la posible implementación de dicho proyecto.
El FCC es un colisionador de partículas propuesto con una circunferencia de aproximadamente 91 km que podría suceder al actual instrumento estrella del CERN, el Gran Colisionador de Hadrones (LHC) de 27 km, en la década de 2040. Su motivación científica proviene del descubrimiento del bosón de Higgs en 2012, junto con otras preguntas cruciales pendientes en física fundamental.
El bosón de Higgs es la partícula más simple, pero a la vez la más compleja, descubierta hasta la fecha, con propiedades que tienen profundas implicaciones para nuestra existencia. Está relacionado con el mecanismo que permitió que partículas elementales como los electrones ganaran masa una fracción de nanosegundo después del Big Bang, lo que permitió la formación de átomos y, por consiguiente, de estructuras. También podría estar vinculado al destino del universo y podría arrojar luz sobre los numerosos misterios sin resolver de la física moderna.
Dos colisionadores
Como se describe en el Informe del Estudio de Viabilidad, el programa de investigación de la FCC describe dos posibles etapas: un colisionador electrón-positrón que funciona como generador de Higgs, electrodébiles y quarks top, operando a diferentes energías en el centro de masas, seguido, en una etapa posterior, por un colisionador protón-protón que opera a una energía de colisión sin precedentes de alrededor de 100 TeV. Los programas de física complementarios de cada etapa se ajustan a las prioridades más altas establecidas en la actualización de 2020 de la Estrategia Europea para la Física de Partículas.
El informe abarca diversos aspectos relacionados con la posible implementación de un proyecto de este tipo. Estos incluyen objetivos físicos, geología, ingeniería civil, infraestructura técnica, dimensiones territoriales y ambientales, necesidades de I+D para los aceleradores y detectores, beneficios socioeconómicos y costos.
El coste estimado de construcción de la etapa electrón-positrón del FCC, incluyendo el túnel y toda la infraestructura, asciende a 15 000 millones de francos suizos, que al cambio son 15.890 millones de euros. Esta inversión, que se distribuiría en un periodo de aproximadamente 12 años a partir de principios de la década de 2030, incluye la ingeniería civil, la infraestructura técnica, los aceleradores de electrones y positrones, y cuatro detectores para su funcionamiento. Al igual que para la construcción del LHC, la mayor parte de la financiación procedería del presupuesto anual actual del CERN.
Jose luis
06/04/2025