El PSOE pierde fuerza en los municipios donde hay centrales térmicas y nucleares pero sigue ganando

La política energética aprobada durante la pasada legislatura del gobierno de Pedro Sánchez incluía un calendario de cierre de nucleares en los próximos quince años y el final temprano de las centrales térmicas de carbón. Es tan temprano que incluso en los últimos meses, algunas propietarias, como Endesa, han anunciado el adelanto de la fecha de algunas de ellas, la de As Pontes en Galicia o la de Litoral en Almería. Y esos cierres suponen un antes y un después para las comarcas afectadas, cuya riqueza económica dependen en gran medida de esas centrales, así que habría que preguntarse cómo se ha reflejado en las urnas de las Elecciones Generales del pasado 10N.

De las quince poblaciones donde se ubican las 15 centrales térmicas que van a cerrar a lo largo del próximo lustro, prácticamente en su totalidad la fuerza política más votada sigue siendo el PSOE, como ha ocurrido tradicionalmente. Sin embargo, en todas ellas, los socialistas han perdido votos de forma evidente. En Asturias se cumple esta regla en todos los municipios: en Carreño (central de Aboño), en Langreo (central de Lada), Ribera de Arriba (central de Soto de Ribera) y en Tineo (central de Narcea).

Otro tanto de lo mismo ocurre en las localidades castellanoleonesas: En Páramos del Sil (central de Anllares), Cubillos del Sil (central de Compostilla), La Robla (central del mismo nombre) y en Vellilla Del Río Carrión (central de Velilla), en la de Baleares (Es Murterar) y en las tres andaluzas: las centrales de Los Barrios, Espiel y Carboneras.

Solo hay una excepción, en el municipio coruñés de Cerceda, donde Naturgy tiene la central de carbón de Meirama. El PP ha arrebatado el primer puesto al PSOE respecto a las últimas elecciones del pasado abril, aunque con tan poca diferencia de votos que no se podría hablar de grandes cambios.

Sin embargo, quien más sufre el retroceso es Unidas Podemos, que en muchos municipios pasa del segundo al cuarto o quinto puesto por detrás de fuerzas más conservadoras o nacionalistas. Es el caso de la central térmica de As Pontes, también en A Coruña, donde PSOE resiste, cayendo del 40% de los votos al 30%, pero quien se desploma de la segunda posición hasta la cuarta es Unidas Podemos, que es adelantado por el PP y BNG.

Teruel Existe

El municipio donde se encuentra la central de Andorra (Endesa) ha experimentado el auge del nuevo partido regionalista que acaba de entrar con un diputado en el Congreso, Teruel Existe, pero no ha arrebatado el primer puesto de los más votados al PSOE, que pese a descender se mantiene. El nuevo partido ha quitado votos sobre todo a Ciudadanos y a Unidos Podemos, que en abril pasado eran segunda y tercera fuerza, y ahora son prácticamente irrelevantes.

En su conciso programa electoral, Teruel Existe incorpora a esta central térmica, y pide "una ****transición justa con reindustrialización e inversión económica que generen alternativas de actividad y empleo antes de que se produzca su cierre". Para ello, exigen "compromiso a Endesa, pero también al Estado, que ha sido propietario hasta 1998 obteniendo millonarios beneficios sin que apenas hayan revertido en el territorio. Compromiso que debería plasmarse en la dotación de infraestructuras de comunicación para este territorio (autovía Cuencas Mineras)".

Evolución del voto en los municipios nucleares

El signo político que domina en aquellas zonas donde hay centrales nucleares es mucho más diverso que en las cuencas mineras. En el caso de Almaraz (Cáceres), gana el PSOE perdiendo algunos votos pero irrumpe con fuerza y se sitúa en el segundo puesto VOX.

Algo parecido ha ocurrido en Cofrentes (Valencia). El derrumbe de Ciudadanos (que ganaron en abril pasado), deja paso libre al PSOE (26%) pisándole los talones VOX (24%).

En Trillo (Guadalajara), sin embargo, no hay ningún cambio respecto a las elecciones pasadas.

Los municipios catalanes donde se encuentran las centrales de Ascó I y II y Vandellós II el descenso se produce también en la primera fuerza de abril, ERC, pero se mantiene en las elecciones generales del pasado 10 de noviembre.