Hidrógeno

El Puerto de Róterdam pisa el acelerador para convertirse en el Centro Europeo del Hidrógeno

El puerto ya ha puesto en marcha la construcción del primer gran electrolizador, una terminal de amoniaco y ha recibido la entrega de las tuberías para los conductos de hidrógeno

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Dado que se espera que la demanda de hidrógeno verde y nuevas formas de almacenamiento de electricidad se dispare en los próximos años, el Puerto de Róterdam continúa posicionándose como un centro neurálgico para estas nuevas industrias sostenibles.

De esta manera, el Puerto de Róterdam está trabajando intensamente para hacer realidad un ecosistema del hidrógeno: desde el desembarco de electricidad verde procedente de parques eólicos del Mar del Norte, producción de hidrógeno verde, el desarrollo de terminales de importación de hidrógeno y de vehículos portadores de hidrógeno, la creación de cadenas de importación, de infraestructuras en Róterdam y entre el puerto y clústeres industriales de Países Bajos y Alemania, hasta una bolsa de hidrógeno y producción de electrolizadores.

Tanto es así, que el puerto ya ha puesto en marcha la construcción del primer gran electrolizador, una terminal de amoniaco se encuentra en proceso de triplicar su capacidad y se han entregado las tuberías para el gasoducto de hidrógeno —que serán instaladas por Gasunie y de las que Shell será el primer cliente a partir de su entrada en funcionamiento en 2025—.

Energía verde

En la propia zona portuaria hay turbinas eólicas con una capacidad combinada de unos 300 megavatios (MW), incluidas 22 turbinas de Eneco, que se instalaron en el dique Maasvlakte 2 a finales de 2022 con una capacidad combinada de 116 MW.

De aquí a 2030, en el Mar del Norte deberán instalarse aerogeneradores con una capacidad de 21 gigavatios (GW), de los cuales 7,4 GW está estipulado que aterricen en el Maasvlakte. Además, el Gobierno de los Países Bajos quiere construir otros 50 GW de parques eólicos marinos entre 2030 y 2050, por lo que la Autoridad Portuaria de Rotterdam está en conversaciones con el Ministerio de Economía y TenneT sobre cómo un tercio de esa cifra puede desembarcar también en Rotterdam, ya sea en forma de electricidad o de hidrógeno producido en el mar.

Hidrógeno verde

Parte de esta energía verde eólica se utilizará en la parte occidental del puerto para dividir el agua (H2O) en hidrógeno (H2) y oxígeno (O). La empresa Battolyser Systems está desarrollando planes para una planta que produzca “battolizadores”: una combinación de almacenamiento de energía ("batería") y un electrolizador. El “battolyser” puede utilizarse para almacenar energía eólica y solar, que luego puede emplearse para producir hidrógeno. El objetivo de la compañía es construir una planta de Battolyser en la zona M4H de Róterdam.

En Maasvlakte 2 se ha creado un parque de conversión para la producción de hidrógeno verde. Varias empresas tienen previsto construir plantas de hidrógeno verde con una capacidad de 200-250 MW cada una. Shell ha tomado la decisión final de inversión para Holland Hydrogen I (una inversión de unos 1.000 millones de euros) y ha iniciado su construcción. BP y HyCC (H2-Fifty) y Air Liquide (CurtHYL) están desarrollando también sus planes. Al agrupar las plantas, pueden utilizar instalaciones comunes como la conexión eléctrica, el suministro de agua y la conexión al nuevo conducto de hidrógeno. Uniper también tiene previsto producir hidrógeno ecológico junto a su actual central de carbón de Maasvlakte.

Como ya se han asignado las parcelas del primer parque de conversión, ahora se está creando espacio para un clúster de electrólisis en otro lugar de la Maasvlakte.

Acuerdos de cooperación

Para que la economía sea más sostenible se necesita mucha más energía verde e hidrógeno del que se puede producir en esta parte del mundo. Es por esto por lo que la Autoridad Portuaria ha dedicado los dos últimos años, a petición del Estado, a buscar por todo el mundo países y empresas que quieran producir hidrógeno y exportarlo a los Países Bajos.

Y se han encontrado con un potencial enorme. En unas 20 regiones, de Australia a Texas y de Chile a España, existe un gran interés por producir hidrógeno para el mercado mundial y se han firmado acuerdos de cooperación para establecer cadenas de importación de hidrógeno.

El desarrollo de esta importación de hidrógeno a través de Rotterdam permitirá a las terminales de tanques pasar gradualmente de la energía fósil a la renovable, poniendo así energía renovable a disposición de la industria local.

Importaciones

Las primeras importaciones de hidrógeno están previstas para 2024 y en total suman un volumen de 4 millones de toneladas de aquí a 2030. Combinada con una producción local de hidrógeno (verde y H-vision) de 0,6 millones toneladas, Rotterdam puede proporcionar casi el 25% de la ambición de la Comisión Europea de producir e importar 20 millones de toneladas de hidrógeno de aquí a 2030.

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