Endesa ha comunicado formalmente a los trabajadores de la térmica de Andorra (Teruel) que en las próximas semanas se iniciará el trámite administrativo ante el Ministerio para la Transición Ecológica para solicitar el cese de la actividad de la central turolense y de la de Compostilla (León).
El presidente del comité de empresa de la central térmica de Andorra, Hilario Mombiela, ha confirmado a Efe la noticia después de la reunión que han mantenido hoy con representantes de la dirección de la empresa después de difundirse la noticia publicada sobre el cierre.
La compañía ha explicado a los trabajadores que el consejo de administración de Endesa ha aprobado su plan industrial para el año 2019 y no incluye las inversiones necesarias en las dos centrales para adecuarlas a la normativa medioambiental antes del año 2020.
Este plan será presentado a los inversores el próximo día 21 de noviembre y "a partir de ahí empezarán los trámites para el cierre", ha apuntado.
La empresa les ha comunicado también la posibilidad de recolocar a los trabajadores de todos "los excedentes de la plantilla" mediante los traslados a otras plantas del grupo, y que se evitarán "medidas traumáticas" ha explicado.
El comité de empresa se reúne esta tarde para valorar las medidas planteadas por la empresa, aunque Mombiela ha advertido que los trabajadores "no nos vamos a rendir, seguimos pensando que en Andorra se pueden seguir haciendo las inversiones".
Además, se ha mostrado convencido de que en la actualidad, "no hay nada que pueda paliar la pérdida de empleo del cierre de la central".
Mombiela ha recordado que los trabajadores habían advertido de la situación desde 2012, y ha destacado que "mucha gente que se verá afectada, no solo los que trabajan directamente en la central sino también todos los sectores que arrastra la central".
Ha dicho que los empleados se muestran muy "preocupados" ante las posibles recolocaciones laborales, que en todo caso, ha recalcado, habrá que llevar a cabo con un plan "adecuado".
Por otra parte, el responsable sindical ha anunciado que ahora deberán coordinarse con sus compañeros de la central de Compostilla para movilizarse.
Ambas regiones, Castilla y León y Aragón, con sus centrales, "han hecho grande a Endesa, y la han convertido en una multinacional", razón, ha subrayado, por la que van a "seguir peleando".
De este modo, la empresa ha comunicado finalmente a los trabajadores lo que a lo largo del día se daba por hecho sin confirmación oficial, el anuncio de cierre de las centrales después de varios años en los que la multinacional, ha comentado Mombiela, "no ha mostrado ninguna disposición a invertir para garantizar su viabilidad y futuro".
Fuentes de Endesa habían explicado esta mañana a Efe que la compañía no había presentado ninguna solicitud de cierre, al tiempo que recordaban que "sigue sin producirse ningún cambio normativo y de mercado" que hagan viables las inversiones que requieren ambas centrales para adaptarse a la normativa medioambiental comunitaria.
Asimismo, estas mismas fuentes confirmaban la reunión del próximo 21 de noviembre de la dirección de la compañía para aprobar sus planes, entre los que no se incluye "ninguna inversión ni para Andorra ni para Compostilla", porque actualmente, siguen sin darse "las condiciones de inversión".
Sobre el futuro de la central, el presidente de Aragón, Javier Lambán, comentaba tras conocer la noticia que el Gobierno central no renuncia a buscar soluciones para alargar la vida de la central durante un tiempo, "siempre que se acomoden a la normativa europea".
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