La italiana Enel, propietaria de las chilenas Enersis, Endesa y Chilectra, planea pedir la revocación de la Resolución 667 de la extinta Comisión Antimonopolios, que impide integrar los negocios de generación y distribución.
Tras la separación de los activos de Enersis en Chile de los de Latinoamérica (estos últimos están ultimando su fusión en estos días), los responsables de la firma italiana tienen la intención de fusionar también los activos que maneja en Chile –Enersis, Endesa y Chilectra- que recientemente rebautizó como Enel Chile, Enel Generación y Enel Distribución.
El problema al que se enfrenta la compañía trasalpina, es que este tipo de operaciones están prohibidas, ya que en 2002, la extinta Comisión Antimonopolios emitió la resolución 667, que obligaba a Enersis a separar los negocios buscando evitar la integración vertical de los negocios de generación y distribución.
La compañía, ahora argumenta que la situación del mercado ha variado, que su exposición en términos de cuota de mercado se ha ido reduciendo al haber nuevsos operadores y mayor competencia. “Hoy no tenemos una posición dominante, y menos si se miran los 84 competidores que hubo en la última licitación. La competencia es mucho mayor y la manera mejor de gestionar esta empresa es como una compañía fusionada”, declararon los responsables de Enel a Tele13.
El principal argumento para lograr llevar a cabo esta operación es lograr mayores eficiencias y reducir los costes, beneficiando no solo la mejora de los resultados de la compañía, sino también abriendo la posibilidad de continuar ofreciendo precios bajos en las nuevas licitaciones.
Con estos argumentos, el presidente de Enersis Chile, Hermann Chadwick ya le ha planteado el asunto al ministro de Energía, Máximo Pacheco, por lo que la intención de la administración Bachelet es plantear el tema para su discusión en los organismos competentes.
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