El consejero delegado de Enagás, Arturo Gonzalo Aizpiri, ha dicho este martes que se está haciendo evidente el "cuello de botella" que hay para enviar gas de España a Europa en las últimas semanas, en las que España está exportando a Francia más gas del que importa por gasoducto de Argelia, noticia con la que abrió este periódico en el día de ayer.
Gonzalo Aizpiri, que ha participado en una mesa redonda de la reunión anual de la patronal gasista Sedigas, ha indicado que España ya está haciendo mucho para contribuir a la seguridad del suministro en Europa a través de las dos interconexiones que hay actualmente con Francia, por Irún (Guipúzcoa) y Larrau (Navarra).
Ha indicado que tradicionalmente estas interconexiones habían tenido un flujo mayoritario norte-sur, es decir de Francia hacia España, pero desde el inicio del conflicto de Ucrania funcionan a "plena capacidad" en sentido sur-norte.
Las interconexiones de gas entre Argelia y España
Gonzalo Aizpiri, que ha explicado que estas dos interconexiones permiten llegar a plena capacidad a los 7 bcm (7.000 millones de metros cúbicos), ha señalado que también ha subido muchísimo la recarga de buques en España y que la recarga de barcos con gas natural licuado (GNL) se ha incrementado en un 289 %.
También ha señalado que Italia va a poner en marcha un "gasoducto virtual", con la recarga de buques pequeños en las plantas de regasificación de Barcelona y Sagunto (Valencia) para llevarlos a una planta en Italia.
El consejero delegado de Enagás ha señalado que el primer 'slot' (ventanas de capacidad para la carga o descarga de barcos de GNL) para hacerlo está reservado para el 5 de junio, con lo que "empieza a funcionar ya y nos da una pista del interés que tendrá" el proyecto del gasoducto Barcelona-Livorno, infraestructura identificada en el plan Repower EU.
Ha señalado que España puede hacer más, pues tiene capacidad excedentaria en sus plantas de regasificación, y ha explicado que Enagás ha creado grupos de trabajo con sus homólogos de Portugal, Francia e Italia para trabajar en susceptibles interconexiones identificadas en Repower EU, como la tercera interconexión pirenaica, esta vez pensada como un futuro corredor europeo de hidrógeno verde.
La generación renovable
Por su parte, el director de Gestión de la Energía y Redes de Naturgy, Pedro Larrea, ha señalado que el sistema eléctrico de aquí a 2030, con el aumento de la generación renovable, va a necesitar más generación térmica con gas y más cogeneración, y sin embargo, en la actualidad hay una falta de inversiones para conservar lo que hoy existe.
También ha dicho que es una pena que España, habiendo sido pionera en el desarrollo de energías renovables, no haya dado un paso al frente en el desarrollo de tecnologías de gases renovables, cuando el 50 % del consumo de gas actual en el país no dedicado a generación eléctrica podría venir del biometano.
En su opinión, no va a ser fácil reducir la dependencia de Europa del gas ruso, y del gas en general, y ha señalado que el reto de hacerlo en dos tercios para el próximo año es muy importante.
Ha indicado que no sólo consiste en poner más plantas de regasificación, como quiere hacer Alemania, sino conseguir el gas, pues en el mercado del GNL puede haber entre 400 y 500 bcm (400.000 y 500.000 millones de metros cúbicos), cuando el gas que importa Rusia de Europa asciende nada menos que a 150 bcm (150.000 millones de metros cúbicos).
El consejero delegado de Nortegas, Javier Contreras, ha indicado que si se considera al gas un elemento indispensable de la transición energética, hay que dar señales para que los países que hacen prospecciones de gas natural aumenten la oferta, ya que contribuirá a reducir los precios energéticos.
También ha destacado la inversión que supondría la sustitución de contadores de gas mecánicos por inteligentes, unos 900 millones de euros para sustituir todos los que hay en España que tendrían un efecto tractor en la economía.
Gloria saval
01/06/2022