El Gobierno de Finlandia se pronunció en contra de proporcionar más apoyo financiero a la compañía de gas Uniper a través de su accionista mayoritario, la finlandesa Fortum, después de que la semana pasada pidiera ser rescatada por el Estado Alemán.
La ministra de Asuntos Europeos finlandesa, Tytti Tuppurainen, dijo que no ve posible que Fortum, de la que el Estado finlandés participa en un 50 %, invierta más en Uniper, el principal cliente extranjero del gigante ruso Gazprom.
Tuppurainen, que también supervisa la gestión de las propiedades del Estado, recordó que Fortum ya ha apoyado a Uniper este año con una inyección de 8.000 millones de euros, lo que es una "gran suma" para un país como Finlandia, según declaró en una entrevista con la agencia STT.
La postura de Finlandia
Ello demuestra que la compañía finesa está "comprometida" con la "supervivencia" de Uniper, principal responsable de las importaciones de gas a Alemania, pero no está en condiciones de "invertir más".
Tuppurainen señaló que la causa de los altos precios del gas, que han puesto en aprietos a Uniper, se debe a la "manipulación del mercado" por parte de Gazprom, que es algo que no vaya a arreglarse en el futuro próximo.
Esto implica que no se puede solucionar con una inyección de capital por parte del principal propietario, indicó la ministra en referencia a Fortum, que posee el 78 % de Uniper.
Agregó que en este sentido el Gobierno finlandés apoya la propuesta de Fortum, que pasa por reorganizar las actividades comerciales de Uniper de forma que las operaciones de importancia estratégica para el sistema energético alemán queden separadas del resto y bajo control del Estado alemán.
Después de que el viernes pasado Uniper pidiera el rescate, el Gobierno en Berlín afirmó que no permitiría que la compañía tuviera que declararse insolvente, pero no dio indicaciones sobre qué medidas pretende tomar al respecto.
El gas de Uniper
Durante el fin de semana, el ministro de Economía y Protección del Clima, Robert Habeck, aludió a la responsabilidad de Fortum, puesto que Uniper "es de alguien, de alguien que es solvente y puede dar apoyo," según dijo en declaraciones a la radio "Deutschlandfunk".
El recorte del flujo del gas ruso que llegaba a Alemania a través del gasoducto Nord Stream en un 60 % a lo largo del mes de junio obligó a Uniper a comprar a proveedores alternativo a un precio mucho más alto que no pudo trasladar a sus clientes, lo que precipitó las pérdidas.
A partir de este lunes se interrumpirá por completo el suministro a través de este gasoducto debido a labores periódicas de mantenimiento, aunque el Gobierno alemán teme que Gazprom utilice la situación para cortar el flujo de forma definitiva.
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