El operador de la red de transporte francés RTE advirtió el viernes que la situación en la mañana de este lunes podría ser tensa en cuanto al equilibrio entre el consumo y la producción eléctrica.
Dicho y hecho. Este domingo el precio del mercado mayorista francés no quería salir. No se publicaba y saltaban las alarmas. Advertían que no se ha llegado a acoplar el mercado, que ha habido una serie de fallos.
Hasta que saltó la bomba. Francia entre las 7 y las 9 de la mañana iba a tener precios disparados que rozarían los 3.000 €/MWh.
Concretamente, los precios serían de 2.712,99 €/MWh de 7 a 8 de la mañana y de 2.987,78 €/MWh de 8 a 9. Ya después el precio se 'normaliza' hasta los 458 €/MWh.
No será hasta las 17.00 horas cuando su precio ya sea parecido al del resto de países.
Y es que Francia tiene un problema importante de suministro eléctrico por sus centrales nucleares que muchas de ellas están en parada. Solo tuvo disponible unos 30 GW de energía nuclear en el día cuando su capacidad es de 64 GW, es decir, la indisponibilidad del parque nuclear supera el 50%.
Y no será cuestión de pocos días. Al menos 14 de los reactores estarán aún cinco meses en parada.
A estas centrales nucleares paradas hay que sumar una ola de frío que hace bajar mucho las temperaturas. Francia es un país que utiliza mucho calefacción eléctrica en sus hogares y por tanto el consumo se dispara cuando hace frío.
Según RTE, debido al descenso de las temperaturas, el consumo eléctrico será elevado este lunes 4 de abril de 2022 y podría alcanzar los 73.000 MW hacia las 09:00 horas. La producción de electricidad debería ser de 65.000 MW, pero Francia debería poder importar hasta 11.000 MW, buena parte de ellos desde España.
RTE pidió a las empresas y comunidades que moderaran su consumo este lunes por la mañana (en particular, entre las 07:00 y las 10:00 horas) y pidió a los franceses que puedan cambiar su consumo de electricidad a este fin de semana en lugar del lunes en lo que respecta al uso de electrodomésticos (como lavavajillas o lavadoras).
Estos gestos pueden tener un impacto real. Por ejemplo, si todos los franceses apagan una bombilla, esto supone un ahorro en el consumo eléctrico de 600 MW, o aproximadamente el consumo de una ciudad como Toulouse.
Miguel
04/04/2022