La petrolera portuguesa Galp ha anunciado que empezará a demoler la antigua refinería de Matosinhos, cerrada en 2021, el próximo lunes, proceso que durará dos años y medio y tras el que se realizará la rehabilitación medioambiental de los suelos.
La demolición será "la cara más visible de un proceso de desactivación y desmantelamiento de la antigua refinería de Matosinhos que se inició hace cerca de dos años", explicó Galp en un comunicado.
Durante ese tiempo, se paralizaron las diferentes unidades y se realizaron los trabajos de limpieza y degasificación, así como de los equipos y tubos, para "garantizar la eliminación de hidrocarbonetos y productos", según la información disponible en su web.
Las fases para Galp
En una primera fase, se demolerán los tanques de almacenamiento de combustible de la zona sur.
La empresa admitió que el proceso podrá causar la emisión de polvo y otras sustancias, así como ruidos más allá de los límites de la refinería, aunque garantizó que implementará medidas de monitorización.
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Galp anunció en febrero de 2022 que la antigua refinería se transformaría en una "ciudad de la innovación" vinculada a las "energías del futuro".
La refinería de Matosinhos, la primera que entró en funcionamiento en Portugal en 1970, paró de forma temporal su producción de refinado de crudo durante la pandemia por los ajustes de consumo de combustible en el mercado ibérico y posteriormente la compañía anunció que dejaría de operar en 2021.
Galp tiene otra refinería en Sines, la única que sigue operativa en Portugal.
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