Renovables

La banca despliega el abanico de alternativas para quienes quieran invertir en autoconsumo

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El autoconsumo fotovoltaico, una vez que el RD 244/2019 ha desatascado el sector, se enfrenta a su mayor escollo: la financiación de las instalaciones. Según UNEF, las perspectivas de crecimiento apuntan a que España instalará entre 300 y 400 MW de nueva potencia al año durante la próxima década, y ahora solo falta decidir quién pone el dinero.

"Hay varios puntos básicos para entender cómo se pueden financiar instalaciones de autoconsumo", señala Pablo Enrile, socio director del Departamento de Corporate y Energía de ONTIER durante la Jornada '**Nuevo Real Decreto de Autoconsumo' **organizada por UNEF,  "primero puede que sea un colectivo quien lo haga, esta posibilidad abre un abanico inmenso de productos financieros, segundo que el autoconsumo sea de proximidad y tercero que haya una diferencia (que ya es posible) entre el titular y el propietario de la instalación".

En ese caso, "es una relación absolutamente civil y privada en el que el regulador no entra, según se recoge en el RD. Esto es, en realidad, un guiño a fomentar la financiación o la inversión en este tipo de proyectos", continúa Enrile, "para ser autoconsumidor no es necesario ser el propietario de la planta, por lo que es posible venderle la energía al consumidor sin considerarse reventa".

La opción más sencilla es que "el propietario, el titular o el autoconsumidor contrate al técnico o la empresa para su instalación y se financie como se ha hecho tradicionalmente: pidiendo un préstamo para un EPC (llave en mano) pero también existen ya en el mercado el renting", explica el experto, "o que el banco financie al consumidor/promotor mediante una cesión de garantía, una especie de PPA de venta de energía, un Energy Supply Contract. Otra alternativa surge con el autoconsumo colectivo. Primero hay que asignar coeficientes de potencia estáticos, lo que no impide que los propietarios puedan ser distintos. Es posible que uno o varios consumidores sean los promotores mientras que los titulares sean otros".

Para Enrile, "esto no es recomendable en comunidades de vecinos porque las relaciones entre ellos pueden terminar muy mal, pero es factible para autoconsumidores de zonas industriales, centros comerciales, etc. La financiación tendrá unas características muy diferentes".

La estructura de más éxito, en este caso, es que el consumidor y el promotor sean distintos, y que a su vez se haga un contrato EPC con el instalador. Al promotor le puede interesar más el negocio del mantenimiento a largo plazo. "Hay algunos inversores que sustituyen la venta de energía por servicios energéticos". En ese caso se buscaría un sistema de financiación on-bill es decir ser comercializador de la energía en red y además vender la generada por la planta fotovoltaica.

Pero una vez que se decide cuál es el modelo a seguir, ¿es fácil conseguir financiación? "El sector energético es una de las palancas que puede revertir la desaceleración de la economía. Es un sector en plena transformación y por eso puede aportar al PIB español un impulso interesante", explica por su parte Jaime Abad, director de Estrategia y Comercialización Digital de Liberbank, "los objetivos de reducción de gases de efecto invernadero y una política europea que quiere liderar las decisiones climáticas van a permitir que los reguladores den vía libre a su desarrollo. Por eso, vemos muy interesante trabajar en la financiación de este sector".

En su opinión, hay varios retos a los que se deben enfrentar las entidades financieras: uno de ellos es asegurar que la financiación se integre en el proceso de venta de energía, otro conocer el impacto evidente que puede tener ese proyecto, además se debe saber cómo gestionar el riesgo de la obsolescencia tecnológica a lo largo del periodo de financiación, por su pérdida de eficiencia energética a medida que se avance en el tiempo, e identificar garantías crediticias para aumentar el abanico de opciones de cara a la financiación. Liberbank entiende que hay que flexibilizar los pagos, es decir, "que haya alternativas que permitan ajustarse a las necesidades tanto de los clientes como de las entidades que financian estos proyectos".

En el caso de Triodos Bank, las condiciones de financiación son muy concretas, "se las ofrecemos a proyectos de personas físicas que pueden ir de entre los 10.000 a los 200.000 euros", puntualiza Vera Pereira, Gerente de Energías Renovables y Eficiencia Energética de esta entidad, "la inversión es del 80%, teniendo que aportar el cliente el 20% restante, por un periodo de ocho años a un tipo de interés del 5%. Además, no pedimos garantías".

Pereira concluye que esta entidad no financia proyectos de grandes dimensiones, "no estamos en project finance".

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