Uno de los grandes problemas de la factura de la luz es su alta carga impositiva. Así lo refleja el último informe de la Dirección de Energía de la Comisión Europea sobre los mercados eléctricos europeos en el cuarto trimestre de 2019. Según los datos de Bruselas, los españoles pagaron la tercera factura de la luz más cara de Europa en 2019 y todo por tener unos altos impuestos energéticos.
Concretamente, el informe muestra los precios minoristas de electricidad para consumidores domésticos representativos en las capitales europeas y sus
composición dividida en cuatro categorías (energía, cargos de red, impuestos de energía y el impuesto al valor agregado (IVA)).
En diciembre de 2019, los precios más altos se observaron en Berlín y Copenhague (32.7 y 31.1 c € / kWh, respectivamente) donde los impuestos a la energía representaron aproximadamente un tercio de la factura final.
Pero los ciudadanos de Madrid, es decir, los españoles, son los terceros con algo más de 24 céntimos de euro por kWh.
Es decir, si los cargos al sistema eléctrico no fuesen tan altos (primas a renovables, devolución del déficit de tarifa, costes extrapeninsulares, impuestos varios (IEE, nuclear, canon hidráulico, etc)), la factura de los españoles sería de las más bajas del Viejo Continente. Quédense solo con las franjas rosa y azul del gráfico.
Tras España se sitúan las islas. Londres, Dublín y Nicosia con precios cercanos a Madrid. Los precios más bajos de los Estados miembros de la UE28 se registraron en Budapest y Sofía (11,3 c € / kWh y 11,6 c € / kWh, respectivamente).
Los niveles más altos del componente energético se informaron desde Nicosia, Dublín y Londres (12-15 c € / kWh), ciudades rodeadas de mercados mayoristas con precios más altos en comparación con el promedio de la UE. Los niveles más bajos del componente energético la energía (4,5-6 c € / kWh) se registraron en las capitales de países con formas más fuertes de regulación de precios (Budapest, Bucarest, Bratislava) o con un alto grado de producción renovable (Copenhague, Estocolmo). El promedio de la UE28 para el componente energético fue de 7,8 c € / kWh (un 4% más que en diciembre de 2018).
Los cargos de red más altos se registraron en Lisboa (10,2 c € / kWh) donde, a pesar de un recorte significativo en 2019, representaron el 45% del precio total y fueron mediblemente más altos que el componente de energía. Las tarifas de red más bajas se recogieron en Valletta (1,6 c € / kWh) y Sofía (2,7 c € / kWh). La media de la UE en el trimestre de referencia fue de 5,3 c € / kWh (1% menos que en diciembre de 2018).
JELorenzo
17/04/2020