Mayo fue un gran mes para los anuncios de nuevos proyectos de energía solar en África, según el Instituto de Economía Energética y Análisis Financiero (IEEFA). Argelia anunció un importante plan solar de cinco años y 4GW que instalará 10 veces la capacidad de energía solar del país con una inversión de entre 3.200 y 3.600 millones de dólares.
Más al sur, Zimbabue anunció una licitación de 500MW de capacidad solar, lo cual es importante teniendo en cuenta que la capacidad total efectiva de Zimbabue es inferior a 1.000MW. Pocos días después, la eléctrica estatal zambiana Zesco anunció que había firmado contratos por 548 millones de dólares con PowerChina para el desarrollo de 600 MW de plantas de energía solar.
Según IEEFA, a medida que la energía solar se vuelve cada vez más barata, inevitablemente se extenderá por África, como lo está haciendo en todo el mundo. La transición energética impulsada por la tecnología es imparable. La escala de los anuncios recientes es digna de mención. Zambia ha estado entre los pioneros de la energía solar a gran escala en África, con sus primeros proyectos en el rango de 30MW a 50MW. En 2019, Zambia registró un precio solar récord en el África Subsahariana de menos de $ 40 / MWh. Ahora, están en marcha iniciativas solares 10 veces más grandes que sus proyectos iniciales.
El anuncio de Zambia también fue significativo por otra razón: su contratista. La participación de PowerChina en un gran proyecto solar africano se produce después del anuncio de China Gezhouba Group de un plan de 500 MW de energía solar en Uganda. Estas incursiones de la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI) en la energía solar africana se producen cuando algunos de los planes de carbón chinos en el continente enfrentan retrocesos.
El proyecto de carbón chino Hamrawein, de 6,6 GW en Egipto, se puso en marcha este año debido a las preocupaciones sobre el exceso de capacidad y la preferencia por las energías renovables. Y la propuesta de carbón de Lamu en Kenia, destinada a ser financiada por el gigante banco comercial estatal chino Industrial and Commercial Bank of China (ICBC), sigue plagada de problemas de planificación frente a la fuerte oposición local.
Sin embargo, aunque PowerChina puede estar a punto de construir 600MW en toda Zambia, en Zimbabue ha sido contratada para construir los primeros 700MW de la planta de carbón Sengwa de 2.800MW para la minera de oro y refinería de metales RioZim. Y en un acuerdo anunciado en abril, China Gezhouba está lista para construir los 2.100 MW restantes de la propuesta de Sengwa. Según los informes, ICBC nuevamente participa en la financiación de $ 3.000 millones.
La determinación de continuar con el proyecto Sengwa tiene poco sentido dado el costo, los préstamos necesarios para financiarlo y los crecientes riesgos financieros de la inversión en carbón. Tiene aún menos sentido cuando considera los detalles del proyecto. Tanto Zimbabue como Zambia necesitan diversificarse para no depender de las centrales hidroeléctricas en la represa de Kariba. Una sequía de larga duración ha llevado recientemente a la escasez de energía en ambas naciones. Los bajos niveles de agua en la presa han visto la capacidad de potencia efectiva de la mayor fuente de energía de Zimbabue reducida de 1.000MW a 600MW.
En este contexto, IEEFA considera que la decisión de diversificar mediante la construcción de una central eléctrica a carbón que dependerá del agua de la presa de Kariba parece cuestionable en el mejor de los casos. En su opinión, la energía solar se ve mucho mejor ubicada para ayudar a Zimbabue a reducir la dependencia excesiva de Kariba, así como de las importaciones de energía de Eskom [Sudáfrica].
Riozim está planeando 178MW de energía solar para satisfacer sus propias necesidades de energía y hacerla independiente de la empresa de energía eléctrica Zesa. La compañía enfrenta una escasez de energía que está poniendo en peligro su futuro, junto con la falta de moneda extranjera y la hiperinflación del dólar de Zimbabue. Estos problemas grandes y difíciles plantean dudas sobre la capacidad de la compañía para asumir un proyecto tan grande como la planta de carbón de Sengwa e incluso sobre el futuro de la compañía misma.
En su opinión adversa sobre las cuentas financieras de RioZim de 2018, los auditores de EY pusieron en duda la capacidad de la compañía para continuar como empresa en funcionamiento. Pero RioZim ya ha identificado la energía solar como la solución a sus propios problemas de escasez de energía. Si intenta continuar con su propuesta de energía de carbón respaldada por China, RioZim y China corren el riesgo de dejar a Zimbabwe con tecnologías de energía incompatibles.
Con una tecnología solar cada vez más barata, las naciones subsaharianas encontrarán en breve que la energía renovable constituirá una gran proporción de sus pequeñas capacidades de energía en general. Esto requerirá una necesidad inmediata de equilibrar la intermitencia de las energías renovables, y las inversiones de carbón cada vez más inadecuadas de China en el continente corren el riesgo de dejar a las naciones con centrales eléctricas de carbón costosas e incompatibles junto con pagos de préstamos insostenibles.
Fuente: IEEFA
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