En 2030, la mitad de los 146 GW de energía eólica instalada en Europa tendrán más de veinte años. El hecho de que, en muchos casos, los activos estén en buenas condiciones de operación, junto con la falta de una regulación clara y homogénea sobre la repotenciación en el continente, está derivando el sector hacia una tendencia natural: la extensión de la vida de los parques eólicos. España es, junto Dinamarca y Alemania, pionera en energía eólica, por lo que es uno de los primeros países en abordar este proceso.
Para abordar los aspectos claves de la extensión de vida útil, los próximos días 19 y 20 de septiembre se celebra en Madrid la_ II Jornada internacional sobre extensión de vida de parques eólicos_. Representantes de empresas y expertos debatirán sobre los elementos claves, los principales retos y las diferentes soluciones.
“La principal razón para alargar la vida útil de los activos es extender su vida económica”, dice José Manuel Marco, de DNV GL.
Los fabricantes con presencia en España cuentan con soluciones innovadoras para el alargamiento de vida que ya están aplicando con éxito. “Un modelo de costes válido que garantice el modelo de negocio del cliente es un factor clave para el alargamiento de vida los activos”, dice Fernando Ibáñez, de Siemens Gamesa Renewable Energy.
Para los fabricantes, empresas de O&M y de servicios, la extensión de vida abre nuevas oportunidades de negocio. Para los promotores, abre la posibilidad de incrementar la rentabilidad: un parque eólico de 15 MW puede incrementar su rendimiento en dos puntos básicos si extiende su vida en 10 años.
Según Enrique Camacho, de Ingeteam, “las empresas se están esforzando en buscar soluciones innovadoras que satisfagan las necesidades de los clientes en términos de rentabilidad y eficiencia”.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios