Renovables  ·  Política energética

La evaluación ambiental de los proyectos renovables, el nuevo quebradero de cabeza de Ribera

El Gobierno ha aprobado 170 declaraciones de impacto ambiental de más de 200 proyectos que ha examinado

3 comentarios publicados

Quién iba a pensar que en 2023 el sector renovable fuera uno de los quebraderos de cabeza del Gobierno de Pedro Sánchez. Este miércoles 25 de enero cumple el plazo para que miles de megavatios obtengan la declaración de impacto ambiental. Si no lo obtienen, tal y como sucederá a centenares de proyectos, los desarrolladores perderán las garantías depositadas.

Esto podría acarrear problemas legales al Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico que ha tenido cinco años para aprobar o rechazar las declaraciones de impacto ambiental (DIA) y no lo ha hecho. O al menos, no como debería.

Prácticamente no ha hecho nada en cinco años, y en los últimos tres meses se ha dedicado a aprobar declaraciones como si no hubiese un mañana para tratar de reducir el impacto que tendrá en el desarrollo de renovables.

El Gobierno tenía la intención de acabar con cierta especulación que se produjo a la hora de obtener el punto de acceso y conexión a la red. Se presentaron miles de proyectos y había peticiones por desarrollar más de 100 GW.

170 proyectos aprobados

Parte de ello se ha instalado, pero aún quedan más de 80 GW por desarrollarse a la espera de la lenta y tediosa administración que no entrega un permiso ni queriendo.

El caso es que el Ministerio que dirige Teresa Ribera ha conseguido finalmente aligerar más de 200 proyectos a los que se les ha realizado la Declaración de Impacto Ambiental a más de 190. Según los datos del Ministerio, 170 proyectos han obtenido DIA favorable.

Poniendo que el mínimo para que lo revise el Ministerio es más de 50 MW, y haciendo una media de 100 MW por proyecto, el resultado sería unos 17.000 MW con DIA aprobada aproximadamente.

A ello hay que sumar la capacidad de proyectos de las distintas Comunidades Autónomas que podría sumar otros 10 GW aproximadamente.

El problema es que muchos se van a quedar sin las garantías, y según fuentes jurídicas se puede solicitar una reclamación a la Administración de turno argumentando que ha sido el Ministerio o la Consejería de turno la que no ha hecho los deberes y ha tardado más tiempo del debido.

Fuentes del Ministerio han asegurado que no se va a mover una coma de lo ya pactado y redactado de tal forma que se avecina lío jurídico de nuevo del sector renovable con un Gobierno de España. Que no han sido pocos.

Las DIA de los macroproyectos

Además, a Teresa Ribera también se le ha formado otro problema con las declaraciones de impacto ambiental. En este caso, a raíz del RD que ha aprobado en el que pretende acelerar la aprobación de proyectos renovables de tal manera que se instale cuanta mayor capacidad antes, mejor.

Pero la norma podría traerle problemas con sus socios de Gobierno que se oponen a dos artículos en los que el Gobierno parece que podría resolver directamente la DIA de los grandes proyectos de renovables, siempre y cuando no toquen ningún terreno protegido.

Este martes en el Congreso, el Gobierno ha recibido duros ataques de Juan López de Uralde (Unidas Podemos) sobre este asunto.

El ministro Félix Bolaños, que no es un erudito en estos temas, salió del trámite como pudo y dejó la puerta abierta a que se modifique parte del articulado de tal manera que se cambie esta fórmula para acelerar la tramitación administrativa de los proyectos renovables.

En opinión del diputado, con estos artículos del decreto lo que se hace es permitir que los "malos proyectos", es decir, aquellos que afecten negativamente al medio ambiente, "se cuelen y perjudican a lo que están haciendo las cosas bien".

También este martes se presentó ante el Congreso un documento contra esta medida aprobada. Cerca de 400 entidades de todas las comunidades autónomas, vinculadas a los territorios afectados y asociaciones ecologistas han mostrado ya su oposición en un documento conjunto publicado en macrorenovablesNO.org.

En definitiva, los socios de Ribera, en el Gobierno y los ecologistas con los que tan bien se lleva, forman parte de este nuevo quebradero de cabeza que se le ha levantado a la vicepresidenta Ribera.

Noticias relacionadas

3 comentarios

  • NMZ

    NMZ

    25/01/2023

    Los extremos no suelen ser buenos y tan malo es lo uno como lo otro...
    No se puede tardar 5 años en dar la DIA de un proyecto, pero tampoco se deberían aceptar proyectos sin más.
    Creo que todos los proyectos se deberían someter a un proceso de Evaluación de Impacto Ambiental, pero las Administraciones deberían ser capaces de dar una respuesta ágil a dicho proceso y no eternizarse como hacen ahora.
    En fin...
  • Miguel

    Miguel

    25/01/2023

    Llevan mucho tiempo las administraciones paralizando los proyectos de forma intencionada. Ya no les quedaba otra que salir por la tangente o pillarse los dedos en procesos judiciales.

    Ahora les pasan la patata caliente a los promotores de los proyectos que se amontonarán todos ahora para instalarlos al mismo tiempo y no habrá suficientes profesionales.
  • Alberto

    Alberto

    25/01/2023

    El debate no debería ser evaluación ambiental si o no. A estas alturas todos sabemos que es un mero trámite para aprobar lo que interesa, la única diferencia entre que se exija o no, es que los proyectos puedan estar autorizados antes o después. Lo realmente importante en este proceso de transición es la ubicación de las macro renovables, que debería dirigirse hacia ubicaciones de mínimo impacto. Es decir, hay que determinar qué zonas son susceptibles de soportar proyectos de renovables a gran escala, como antiguas minas, escombreras, vertederos, taludes, autopistas, invernaderos... El Observatorio de Sostenibilidad junto a ALIENTE han identificado hectáreas suficientes en terrenos ya degradados con capacidad para instalar 10 veces la potencia prevista por el PNIEC. Aquí el informe -> https://aliente.org/informe-renovables-aqui-si
    Y así no colonizamos el campo convirtiéndolo en zonas de sacrificio, evitamos enfrentar a los pueblos, vaciarlos, cargarnos su tejido productivo, su biodiversidad, sus paisajes... en definitiva respetamos a los territorios y a sus habitantes ¿Seremos capaces?

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios

Este sitio web está protegido por reCAPTCHA y la Política de privacidad y Términos de servicio de Google aplican.