Impulsado por las políticas públicas y la disminución de los costes de las baterías, el mercado mundial de autobuses eléctricos se triplicará para 2025. El mercado chino, el más prometedor en este sector, superará la marca de 1 millón de autobuses eléctricos en 2023 y alcanzará los 1,3 millones para 2025, según una nueva investigación de Wood Mackenzie.
China domina el segmento de vehículos eléctricos pesados (EV), y representa el 98% del mercado mundial de autobuses eléctricos hasta 2018. Para respaldar esta alta concentración de autobuses eléctricos, habrá un total de más de 50.000 puntos de carga de e-buses instalados a finales de 2019. Esta cifra se duplicará a finales de 2025.
Timotej Gavrilovic, analista de investigación colaborador de Wood Mackenzie, dijo: "En 2018, el 23% de las compras de autobuses en China fueron eléctricas. Se espera que las compras totales de autobuses en el país se mantengan estables, con 420.000 nuevas compras para 2025. Se espera que las compras de e-buses aumenten junto con un mayor crecimiento del mercado y el apoyo de los gobiernos, alcanzando el 40% de las nuevas compras de autobuses a nivel mundial en 2040".
Según el informe de Wood Mackenzie, un total de 40.000 vehículos pesados eléctricos estarán circulando por las carreteras de EEUU y Europa para 2025. El mercado actual se expandirá hasta 7.300 autobuses a finales de 2019, lo que supone un mercado incipiente en ambas regiones, que suma casi 6.000 millones de dólares en valor de mercado.
“La mayoría de los operadores de autobuses escolares y de tránsito aún desconfían de una nueva tecnología como la de los autobuses eléctricos y continuarán probando los equipos antes de invertir en aumentar el tamaño actual del mercado. Sin embargo, las agencias gubernamentales y de tránsito tienen objetivos de transporte limpios que deberían acelerar el crecimiento más allá de 2025. No se espera que los autobuses eléctricos de larga distancia ingresen al mercado antes de 2023 y es probable que se limiten al 1% de las nuevas ventas hasta 2025. El crecimiento de los e-buses en Europa está impulsado por los despliegues de autobuses urbanos, mientras que el mercado de EEUU está impulsado por los e-buses de tránsito y escolares.
"El gobierno, los operadores de autobuses escolares y las empresas de transporte no son las únicas organizaciones que impactan e influyen en la electrificación. Las eléctricas de EEUU y Europa están comenzando a examinar nuevos modelos para respaldar la carga de autobuses en las cocheras y alentar a los operadores a administrar la carga en beneficio de la red. Dominion Virginia Power ofreció la propuesta más agresiva hasta el momento, desarrollar la infraestructura de carga y pagar la diferencia de coste entre un autobús diésel y un autobús eléctrico para el 100% de todos los reemplazos de autobuses diesel en su territorio de servicio para 2030”, agregó Gavrilovic.
Infraestructura de carga limitada en EEUU y Europa
El despliegue de la infraestructura de carga de autobuses eléctricos ya ha comenzado a aumentar en China. Sin embargo, el crecimiento en EEUU y Europa está limitado por el tamaño de los pilotos existentes, donde entre uno y cinco puntos de carga suelen ser suficientes para soportar varios autobuses. A pesar de esto, el número total de puntos de carga para las tres regiones aumentará más del doble hasta un total de 108.000 puntos de carga para 2025.
“Se instalarán más de 68.000 cargadores en todo el mundo desde 2019 hasta 2025 para satisfacer la demanda de carga de autobuses EV, con más de 9.000 ubicados en Europa y EEUU. Después de implementaciones más grandes de autobuses eléctricos después de 2025, y posibles sinergias con la carga de camiones y flotas eléctricos, se puede esperar una mayor relación de autobuses eléctricos y estaciones de carga. Esto conduciría a una tasa de crecimiento más lenta para la infraestructura en relación con la demanda de autobuses.
“Nuestro pronóstico asume que todos los cargadores de e-bus son cargadores en cocheras. En la práctica, esto no siempre es así, ya que la carga en ruta representará una fracción de los cargadores desplegados. El cobro en ruta se utilizará más comúnmente en aplicaciones de tránsito intraurbano, ya que sus rutas están predeterminadas. Un mayor porcentaje de cargadores en ruta aumentará la cantidad de puntos de carga desplegados por autobús y disminuirá el tamaño de la batería requerido para que los autobuses operen ”, añadió Gavrilovic.
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